La diputada del BNG Montse Prado cree que el Servizo Galego de Saúde (Sergas) va de «ocurrencia en ocurrencia» con sus medidas para cubrir vacantes en verano, que «se reducen a que los profesionales trabajen más».
Así lo resume la portavoz del Bloque en materia de sanidad, después de que el Gobierno gallego aprobase este mismo lunes un plan veraniego por 12,5 millones de euros con medidas como que los MIR de 4º año pasen consulta, contratar a facultativos con segundas residencias en zonas de costa y que médicos del 061 trabajen en los PAC.
La nacionalista critica que la Xunta espere «a mediados de junio» para aprobar este plan lleno de «ocurrencias» y que «no aporta soluciones porque no va al fondo del problema», que sería afrontar «el déficit estructural de profesionales, la precariedad o los presupuestos insuficientes».
Así, Montse Prado cree que los centros de Atención Primaria van a vivir otro verano de «situaciones límite», porque las medidas propuestas implican «que un médico o una médica haga el trabajo de varios».
«Ahora, además de que trabajen más horas, el Gobierno de Rueda le pide a los profesionales que tienen segunda residencia en zonas de costa que acepten trabajar en otros centros de salud, o que los ayuntamientos le pongan casa a disposición para que vayan a pasar la sus vacaciones y pasen consulta», censura la diputada del BNG.
Prado también denuncia que los MIR vayan a asumir un trabajo «sin que esté garantizada su supervisión, tal y como establece la legislación». Además, esto «va a producir más inequidad» porque, a su juicio, solo se beneficiarán los grandes centros de salud.
En definitiva, la portavoz sanitaria del BNG explica que no es que no haya médicos porque «el sistema funcione mal», sino «por consecuencia del maltrato continuado y de las malas condiciones laborales» de las que culpa al Sergas.
Por ello, emplaza al PP a «dejar de echar balones fuera» y a «rectificar» y «ejercer de gobierno tomando medidas serias y asumiendo sus competencias» en materia de salud.