El eurodiputado del PSdeG y candidato socialista al Parlamento Europeo, Nicolás González Casares, y el secretario xeral del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, responsabilizan a la Xunta de una «mala planificación» que ha llevado a un «parón» eólico, por lo que llaman a un cambio de políticas en renovables que permitan aprovechar una «oportunidad histórica» para Galicia.
En declaraciones este martes en Santiago con motivo de un encuentro con la Asociación Eólica de Galicia, González Casares ha mostrado su preocupación por este parón eólico y apela a no quedarse «parados» ante la transición verde, puesto que defiende «más energía limpia y asequible para mover» a la industria gallega. «Nosotros en la directiva de renovables lo que hicimos fue mejorar los procesos de participación pública para que los beneficios de energía renovable, la eólica por ejemplo, queden en el territorio», agrega.
Y es que alerta de que la industria gallega está lejos del objetivo de representar el 20% del Producto Interior Bruto (PIB), «bajando» a entre el 13% y 14%. Quiere subir este peso «y el único modo» es a través de «energía limpia y asequible», con lo que Galicia se convierte en «menos dependiente».
Recuerda que el Gobierno central consiguió abaratar facturas eléctricas con la excepción ibérica, de forma que ahora los gallegos «están menos preocupados» que hace dos años por el precio de la luz. Casares defiende que «el beneficio real de esa energía limpia tiene que quedar aquí».
PÉRDIDA DE 6.000 MILLONES
En esta línea, Besteiro censura que «este parón se inició ya por el año 2010, cuando el Partido Popular, recién llegado a la Xunta de Galicia, hizo un cerrojazo a la industria eólica y después no fue quien de adaptarse, de planificar adecuadamente».
Achaca la parálisis del sector a «una incompetencia de no legislar adecuadamente en el momento que tocaba» por parte de la Xunta, con una pérdida de «casi 6.000 millones» y «14.000 empleos».
Incide en la necesidad de un impulso para atraer industrias, puesto que Galicia «debe ser» una potencia en producción eólica, dado que «viento y agua no lo hay en todos los territorios de la Unión Europea ni en España». Contrapone esta situación de «perder oportunidades» con otras comunidades, como Aragón, que «ganan en detrimento» de Galicia.