La Asociación Eólica de Galicia (EGA) ha reivindicado este viernes una política de integración ambiental e industrial para tener energía limpia, sostenible y barata. Así ha instado a superar «la dramática situación del bloqueo» del sector y ha advertido de que hay «muchos» parques «amenazados por su próxima caducidad».
«Urge superar de una vez por todas la dramática situación de bloqueo en la que nos encontramos desde hace más de tres años. Tras las sentencias favorables para la construcción de los nuevos parques eólicos del Tribunal Supremo (TS) y del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE), interesa acordar políticas que trasciendan el ámbito local, fundamentadas en la legislación correspondiente que trasponga la directiva europea que otorga el rango de interés público superior a las energías renovables», defiende EGA, en un comunicado.
A renglón seguido, ha argumentado que hacerlo «significa que las fuentes limpias son un bien estratégico que está por encima de otras consideraciones». A su juicio, en última instancia, se está «ante una cuestión de salud pública, de seguridad nacional y de los propios derechos de los consumidores».
«Después del pronunciamiento favorable del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, la práctica totalidad de los parques nuevos están a la espera de resolución por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, muchos amenazados por su próxima caducidad», advierte EGA.
«Por si fuera poco, el Gobierno de España ha presentado un recurso de inconstitucionalidad contra las repotenciaciones obligatorias de la Xunta de Galicia. Así que ahora tenemos una maraña judicial entre Administraciones, cuando las empresas ya habían previsto o iniciado las susodichas repotenciaciones; porque una cosa es impulsarlas con una planificación y otra, obligar a hacerlas. Hay parques de más de veinte años cuya eficiencia o producción de electricidad está como al principio de su vida, rayando el 99% de su disponibilidad», subraya.
El sector incide en que «esta es la realidad, con 2.500 megawatios (MW) y 3.500 millones de euros en compás de espera».
«La solicitud de los acuerdos bilaterales entre promotores de nueva energía renovable y empresas electrointensivas (PPAs), que aseguran un precio competitivo a medio plazo, está en caída libre. Y, tras el apagón en España del 28 de abril, es obvio que necesitamos fortalecer y mejorar las redes de transporte eléctrico mediante tecnologías adicionales que mantengan la seguridad del sistema», ha agregado.
«PARÓN INDUSTRIAL DEMOLEDOR»
«Y si al atasco judicial en tierra le añadimos la coyuntura en que se encuentra la eólica marina, en situación de parada y a la espera de que el Ministerio avance con el desarrollo de los planes de ordenación del espacio marítimo, el parón industrial en el que seguiremos es demoledor. Mientras Japón, China, Reino Unido y Europa apuestan por los recintos marinos, nosotros seguimos en espera, cuando Galicia lo tiene todo», ha contrapuesto.
En el comunicado, se apunta que «la eólica marina es la energía del futuro, es la que va a asegurar el horizonte industrial gallego». «Entendemos que alguna de las zonas propuestas por el Ministerio debe servir», indica la patronal, que también reivindica que «mantener activa la cadena de valor es esencial, igual que los servicios básicos durante el confinamiento».
«Galicia llegó a poseer la fábrica de palas más grande de Europa y la quinta parte de las plantas de España, así como la industria de todos los componentes de un aerogenerador. Teníamos los mejores y más cualificados profesionales. Aún hoy se sigue reconociendo la formación de nuestros operarios y directivos. Pero cada vez quedan menos, porque están trabajando en el extranjero donde se los rifan. ¿Por qué será? Es evidente que el sector agoniza en Galicia», se queja la patronal eólica.