El Ayuntamiento de A Coruña ha aprobado, en la Junta de Gobierno, el proyecto de construcción de un nuevo edificio de 50 viviendas de promoción pública en el barrio de Xuxán.
El inmueble, que estará situado en la parcela Z-37 del antiguo Parque Ofimático, incluirá viviendas en régimen de alquiler social. En los tres sótanos proyectados habrá, además, un centenar de plazas de aparcamiento.
Además, en la Junta de Gobierno, se aprobó inicialmente el plan especial para permitir usos comerciales en la parcela del antiguo Club Financiero A Coruña.
Así lo expuso la alcaldesa, Inés Rey, en rueda de prensa en la que, sobre las viviendas proyectadas, remarcó que no es una «competencia propia», pero que se hace dentro de los recursos municipales para «paliar la ausencia de inversiones suficientes por parte de quien sí tiene esas competencias y no invierte en la ciudad», sostuvo sobre la Xunta.
La construcción del inmueble, promovido por el Ayuntamiento con fondos propios y también procedentes de las convocatorias Next Generation, supondrá la creación de un total de 50 nuevas viviendas, de las que un total de diez serán adaptadas.
CONFLICTO DE BASURA
Ya a preguntas de los periodistas, y sobre la situación de la recogida de la basura en la ciudad y el conflicto que mantienen el Sindicato de Trabajadores STL, representante en el comité de empresa, y la dirección de la misma, ha asegurado que la postura del consistorio pasa por «velar por el cumplimiento del contrato». Con todo, ha dicho que le corresponde a la empresa «solucionar» la situación relativa a las demandas laborales.
Mientras, cuestionada sobre el futuro de los murales de Urbano Lugrís ubicados en la calle Olmos, ha pedido la colaboración de la Dirección Xeral de Patrimonio para «velar» por ellos y garantizar su conservación.
«Hay una sociedad en concurso de acreedores y el administrador concursal tiene que liquidar bienes de la sociedad donde están esos murales», ha dicho en alusión al procedimiento existente para la subasta de bienes de la citada sociedad, entre los que se encuentran los murales.
«Hay que garantizar la conservación de los mismos y la permanencia en la ciudad, con independencia de su titularidad», ha recalcado para incidir, además, en que el consistorio fue quien solicitó su declaración como Bien de Interés Cultural (BIC).