La agencia de calificación Moody’s Investor Service ha aumentado un escalón el rating a largo plazo de Abanca de ‘Ba1’ a ‘Baa3’, situándolo en grado de inversión, al tiempo que ha mantenido su perspectiva estable.
El rating a corto plazo, a su vez, mejora de ‘Not Prime’ a ‘P-3’. El resto de calificaciones de Abanca han sido afirmadas sin cambios, según informa la propia entidad en un comunicado de prensa.
Tras esta decisión, Abanca cuenta con grado de inversión en los ratings de Moody’s, Fitch y DBRS. El cambio en la calificación comunicado por Moody’s se debe a la nueva metodología de la agencia y al reconocimiento por su parte del perfil financiero del banco que preside Juan Carlos Escotet, que considera estable en el actual contexto económico.
Moody’s resalta en su calificación la resiliencia, la calidad de los activos, la solvencia y las expectativas de rentabilidad de la entidad financiera.
TENDENCIA POSITIVA
En 2021, la trayectoria de Abanca está siendo valorada por las agencias de rating. Tres de las cuatro agencias que califican a la entidad han emitido evaluaciones durante este año.
De ellas, dos (Fitch y Standard and Poor’s) han mejorado la perspectiva, mientras que la tercera (Moody’s) ha comunicado una subida de rating, situándolo en grado de inversión.