La Policía Local de Lugo ha informado de que, en la madrugada del 24 al 25 se establecieron diversos filtros de seguridad vial en el centro urbano y que fue interceptado en la Rúa Río Lor un conductor que circulaba de forma irregular. Al darle el alto, se comprobó que carecía de permiso al haber perdido todos los puntos.
Tras la ratificación de este hecho, se procedió a instruir diligencias por un delito contra la seguridad vial en su modalidad de juicio rápido y se procedió a inmovilizar el vehículo.
Asimismo, en la Rúa San Roque se dio el alto a un vehículo, comprobando que su conductor presenta signos de embriaguez. Como resultado de las pruebas dio un resultado positivo de 0,47 mg/l, por lo que se le abrió expediente sancionador con multa de 500 euros y la retirada de 4 puntos del permiso de conducción. Además, se inmovilizó el vehículo.
Igualmente, en un control establecido en la Rolda da Muralla se detectó un conductor que presenta signos de embriaguez, siendo sometido a las pruebas reglamentarias.
En ellas, arrojó un resultado positivo de 0,68 mg/l, tras lo que se le sancionó con una mula de 1.000 euros y la retirada de seis puntos del permiso de conducción, inmovilizando el vehículo.
DISCUSIÓN DE PAREJA
En el marco de los servicios destacados durante los días 24 y 25 de julio, la Policía Local también ha informado de que una patrulla del grupo operativo nocturno fue comisionada por la sala del 092 para que acudiese a la Rúa Castelao, donde una pareja discutía en la vía pública.
Según el relato de los agentes que se trasladaron, en la calle estaban una mujer y su pareja, además del hijo de ella. Cada uno de los miembros de la pareja fueron entrevistados por separados y ambos manifestaron que, en el transcurso de la noche el hombre se presentó en la vivienda común ebrio y que gritó al hijo de su pareja por usar su cargador del móvil.
Ella habría mediado en la discusión y tomado la decisión de abandonar la vivienda en compañía de su hijo, siendo seguida por su pareja pues, según relata la Policía Local, «temía que le pudiese pasar algo ya que estaba muy nerviosa».
Asimismo, los agentes comprobaron que no se había producido ningún tipo de agresión, ni amenazas. Tampoco existía orden de alejamiento ni otras medidas cautelares, y ninguna de las partes deseaba presentar denuncia. Ambos decidieron que el hombre abandonase la vivienda y él procedió a entregar las llaves a su pareja, finalizando el servicio sin otra novedad.
RUIDOS EN EL INTERIOR
Igualmente, agentes de la Policía Local acudieron ante protestas de residentes de la Rúa Alfonso X y de la Avenida da Coruña por ruidos a dos pisos ubicados en ambas calles.
En el caso de la Rúa Alfonso X, los agentes tuvieron que llamar varias veces a la puerta de un piso en el que se escuchaba música en tono muy alto y cuando salió el responsable explicó que había consumido alcohol antes de quedarse dormido, no siendo consciente del volumen al que tenía el equipo musical. Tras ser requerido para que cesasen las molestias, lo hizo y se levantó parte por presunta infracción a la ordenanza de protección ambiental.
También se identificó y se levantó acta en la vivienda de la Avenida da Coruña donde había música alta. El responsable cesó, asimismo, las molestias, en cuanto fue requerido por la Policía Local.