La Diputación de Lugo ha decidido suspender las visitas y salidas en las residencias de A Fonsagrada y Pol, que dependen de la institución provincial y que se encuentran fuera del distrito sanitario de A Mariña, «como medida preventiva» ante la evolución del rebrote.
Ambos centros se encontraban aplicando las medidas de la fase 2 desde el pasado 25 de junio y las de Ribadeo y Trabada estaban cerradas a personal externo y no se permitían ya salidas.
El presidente de la Diputación, José Tomé Roca, indicó a través de un comunicado que la medida pretende adelantarse a las disposiciones de la Xunta para el control de la propagación del virus en las zonas cercanas a A Mariña.
Para «reforzar la prevención y minimizar el riesgo de contagio», se hará una desinfección integral de las instalaciones de estos cuatro centros. La Diputación, defendió Tomé Roca, aplica «las máximas medidas de prevención» para evitar contagios, en especial en las residencias, puesto que sus usuarios «son las personas más vulnerables ante la COVID-19».