El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, ha pedido a la Xunta que «deje de culpar a los demás» del trabajo que «no hace» para evitar el arrastre a los ríos en las zonas afectadas por los incendios.
Así lo ha trasladado en declaraciones a los medios después de que el conselleiro de Presidencia, Diego Calvo, pidiese este jueves una reunión «inmediata» con la Confederación Hidrográfica Miño-Sil para «coordinar actuaciones» y evitar «en la medida de lo posible» arrastres de ceniza y restos tras los incendios que afectaron especialmente a la provincia de Ourense.
El conselleiro aseguró que la Confederación Miño-Sil «es quien tiene el poder de dar las autorizaciones para hacer cualquier obra» y «es quien tiene la competencia». «El día 28 de agosto el presidente de la confederación le remitió una carta a la conselleira de Medio Ambiente y el 29 le contestó poniéndonos a su disposición, pero no tuvimos ningún tipo de noticia desde ese día», añadió.
Al respecto, Pedro Blanco ha subrayado que el Gobierno de España «actúa con responsabilidad y dentro de sus competencias» y ha dicho que la Confederación Hidrográfica Miño-Sil interviene sobre los cauces, no sobre los montes, cuya limpieza y prevención son competencia exclusiva de la Xunta de Galicia.
Además, ha informado de que 12 brigadas de la Tragsa trabajan en Ourense para evitar arrastres y minimizar el impacto ambiental tras los incendios. «Estamos actuando donde debemos y como debemos, con rigor técnico y eficacia, con una inversión de 3 millones de euros», ha destacado.
El delegado ha asegurado que el Ministerio de Agricultura ya pagó 27,8 millones de euros en ayudas que benefician a agricultores y ganaderos afectados por los fuegos y le ha pedido a la Xunta que «haga lo mismo» y deje de «culpar a los demás del trabajo que no hace».

