La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha ironizado con que el presidente de la Xunta y del PPdeG, Alberto Núñez Feijóo, «tiene toda la razón» cuando dice que «representa a toda la derecha» en Galicia, porque esto también incluye «a la ultraderecha, a aquellos que no creen en la política».
Así ha cargado este domingo contra el mandatario gallego, durante un mitin en el centro de Vilagarcía de Arousa (Pontevedra) en el que ha arropado al secretario xeral del PSdeG, Gonzalo Caballero, como candidato del «cambio» en las elecciones del próximo 12 de julio. En el acto también han intervenido la presidenta de la Diputación de Pontevedra, Carmela Silva; el alcalde de Vilagarcía y presidente de la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp), Alberto Varela; y el diputado autonómico e integrante de la lista por Pontevedra Julio Torrado.
Rodeada de cientos de personas ataviadas con mascarillas, Montero ha proclamado que Galicia «necesita un cambio» porque «tiene que estar a la vanguardia» y «a la altura de la innovación». «Necesitamos, para que este país progrese, que Galicia se ponga en pie, que sea capaz de pelear por lo que le corresponde. Necesita servicios públicos de calidad», ha valorado.
La ministra portavoz del Gobierno de coalición ha dedicado parte de su discurso para desmentir la moderación del presidente de la Xunta, quien, según sus palabras, pretende transmitir el «viejo cuento» en el que hace «de poli bueno» para «intentar parecer distinto a lo que hace el PP en el resto de España»: «La política de acoso y derribo de intentar tumbar al Gobierno».
«No vale utilizar una situación tan grave en nuestro país para intentar sacar rédito político», ha añadido, para criticar a los populares, quienes, como la «ultraderecha» de Vox, «sigue creyendo» que el Ejecutivo «salido de las urnas» es «ilegítimo».
FEIJÓO «TOCA LAS PALMAS» A CASADO
Aprovechando además la presencia en Santiago del presidente del PP, Pablo Casado, en otro mitin de precampaña, Montero ha afeado a Feijóo que «toque las palmas» al discurso de su líder y que «no cuestione» su política. «Simplemente, para diferenciarse, intenta utilizar palabras más suaves. Pero en el fondo la política, las propuestas y la ideología son las mismas», ha asegurado.
De igual modo, ha reivindicado las medidas impulsadas por el Gobierno en materias como la sanidad, porque «no se puso de perfil» aunque estuviesen «intactas las competencias de las comunidades autónomas».
«¿Qué es esto de que ahora digan presidentes de comunidades que había un mando único y que no tenían responsabilidad? Mienten, siempre conservaron las competencias de residencias de mayores, de los centros sanitarios, de la Atención Primaria, de la educación, de todos los servicios que prestan», ha afirmado.
FONDO DE 16.000 MILLONES A CCAA
María Jesús Montero también ha aprovechado para recordar el fondo de 16.000 millones de euros no reembolsables a las comunidades autónomas aprobado en Consejo de Ministros y los 300 millones transferidos para gasto sanitario al inicio de la pandemia. Así, ha cifrado en «más de 1.200 millones» el montante recibido por Galicia mientras Feijóo «dice que le parece poco, dice que es injusto el reparto y dice que le corresponde más dinero».
«¿Dónde, un gobernante al que otra administración sin corresponderle le da dinero, tiene que realizar algún tipo de reproche, de acusación, de infamia, de mentira? Galicia tiene lo que le corresponde. Igual que lo tiene Cataluña, igual que lo tiene Andalucía, igual que lo tiene Madrid. Porque este Gobierno no mira el color político de los que gobiernan, mira a la gente, solo a la gente», ha garantizado la ministra.
Montero también ha afeado a Feijóo que insista en defender que la Unión Europea debe imponer «alguna condicionalidad» a las transferencias que llegan a España. «Van a decir que no desembolsen mucho porque este Gobierno no sabe gestionar adecuadamente el dinero. Estos son los patriotas que van a contar y a transmitir mentiras y a dejar sin el pan, sin la sal, a nuestra tierra», ha aseverado.
«Por eso, Gonzalo, ha llegado el cambio a Galicia», ha proclamado a continuación, con la mirada puesta en el candidato socialista y con la esperanza de que ponga fin a «11 años duros» de una Xunta que «no cree en la sanidad pública, en la educación pública, en la política de dependencia y de estímulo local», sino que «prefiere los modelos privatizados» y «el clientelismo».