Todos los centros sanitarios y sociosanitarios de Galicia públicos y privados, entre ellos las residencias de mayores, estarán obligados a informar «con carácter urgente» y «en el plazo máximo de dos horas» de los fallecimientos que se produzcan relacionados con COVID-19 y «con independencia de su causa inmediata».
El Diario Oficial de Galicia (DOG) recoge este martes un acuerdo del Consello de la Xunta, fechado a viernes 3 de abril, en el que se indica que todos estos centros deberán declarar no solo de las muertes, sino de «todos los casos» de coronavirus e infecciones respiratorias agudas registradas «tanto en las personas usuarias como en el personal».
En relación a los positivos por COVID-19, los datos deberán ser comunicados de forma diaria y estar a disposición de la Dirección Xeral de Saude Pública entre las 15,00 y las 18,00 horas. En cuanto a los fallecimientos, deberán informarse en menos de dos horas a contar desde el «momento en que se produzcan».
Además, los establecimientos sanitarios públicos lo harán a través de una aplicación informática corporativa, mientras que el resto de centros y servicios sanitarios y sociosanitarios tendrán que informar a las jefaturas territoriales de la Consellería de Sanidade «respetando los principios de confidencialidad, rapidez y utilidad».
En el caso concreto de los usuarios con coronavirus, los centros deberán comunicar nombre y apellidos, DNI, fecha de inicio de síntomas, existencia o no de muestra, fecha de recogida de la muestra, si hubo ingreso hospitalario, si está en un domicilio, si está en una residencia y el nombre de esta. Si fallece, indicarán lugar, causa y fecha de la muerte.
Respecto del personal, se requerirá nombre y apellidos, DNI, puesto laboral, fecha de inicio de síntomas, existencia o no de muestra, fecha de recogida, hospitalización y si muere por COVID-19 y fecha.
Asimismo, el acuerdo publicado este martes establece que «será responsabilidad de la persona titular de la dirección o gerencia del centro, servicio o establecimiento» asegurar «que todos los facultativos médicos» informen «en tiempo y forma». En este sentido, deberán facilitarles los medios «para que puedan cumplir» con estas indicaciones.
Este nuevo acuerdo, fechado el pasado viernes, permanecerá en vigor «mientras se mantengan el estado de alarma –desde la medianoche del 14 al 15 de marzo– y la emergencia sanitaria» –declarada el viernes 13 de marzo– y tendrá el objetivo de «disponer en todo momento de la información puntual sobre el avance del virus y sus consecuencias».
Hasta el momento, la cuantificación de las víctimas con COVID-19 elaborada por el Servizo Galego de Saúde (Sergas) no recogía los fallecimientos registrados fuera de centros hospitalarios, entre ellas las producidas en residencias geriátricas.
«TODA LA INFORMACIÓN DE TODAS LAS RESIDENCIAS»
Este mismo domingo, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, mantenía una reunión por videoconferencia con los presidentes autonómicos en la que indicaba que quería «toda la información de todas las residencias, tanto públicas como privadas», para poder hacer «un seguimiento adecuado» durante la crisis del coronavirus.
A raíz de ello, se publicaba en el Boletín Oficial del Estado (BOE) que esta información será remitida al Ministerio de Sanidad «por primera vez antes del día 8 de abril», es decir, este miércoles, y que desde entonces será actualizada «cada martes y viernes antes de las 21,00 horas».
Sin embargo, en el caso del protocolo único emitido por el Gobierno para computar los fallecidos, las instrucciones dadas por el departamento de Salvador Illa a las comunidades autónomas solo requiere contabilizar aquellas muertes confirmadas como casos de COVID-19, no las sospechosas.