La nueva presidenta del Sindicato de Enfermería (SATSE), Laura Villaseñor, ha planteado la prioridades en las que trabajará la organización en los próximos años, como la «revitalización sindical», la mejora de las condiciones laborales y profesionales de las enfermeras y fisioterapeutas, y el «crecimiento, cohesión y reconocimiento» de ambas profesiones sanitarias.
Tras resultar elegida por unanimidad en el XVI Congreso Estatal de SATSE, Laura Villaseñor ha empezado a trabajar para propiciar el avance de unas profesiones sanitarias que «no se detienen y que, cada día, se reinventan para ofrecer la mejor respuesta a las personas». Para ello, entiende que las enfermeras y fisioterapeutas deben dar «un paso al frente» y hacer valer su «enorme potencial».
Laura Villaseñor, enfermera con experiencia asistencial y docente, considera «imprescindible» apostar por la revitalización sindical, para lo que «hacen falta organizaciones flexibles, con liderazgos fluidos, el uso de las más avanzadas herramientas y la actualización de las infraestructuras». «Todo ello permitirá favorecer la comunicación y la participación», ha asegurado.
La mejora de las condiciones laborales de ambos colectivos será otro de los principales «caballos de batalla» de la organización, teniendo en cuenta la «múltiple dualidad laboral existente, entre sector público y privado, entre fijos y eventuales, especialistas y no especialistas».
«Vamos a trabajar no solo por más empleo, sino por un empleo digno y de calidad, por puestos adecuados a los conocimientos y habilidades específicos de cada profesional, y también por más espacios y ámbitos de trabajo», ha apuntado la presidenta de SATSE.
Villaseñor también considera «imprescindible» que las enfermeras sean quienes asuman el abordaje de la cronicidad, la pluripatología y la dependencia, poniendo el foco en el «liderazgo» de la Atención Primaria, la hospitalización a domicilio, centros de media estancia y el ámbito sociosanitario. También entiende que en dichos espacios los fisioterapeutas tienen un «amplísimo campo de actuación».
Asimismo, el Sindicato de Enfermería defenderá unas condiciones laborales que «aseguren la seguridad y la salud» en los lugares de trabajo, y seguirá luchando contra las agresiones, reclamando «un abordaje integral para combatirlas desde las administraciones».
También se buscará «la dignidad profesional de las enfermeras y que se permita desarrollar al máximo sus competencias y su capacidad gestora e investigadora».
«Avanzar en competencias, pero sin perder nuestra esencia, el cuidado. Ha de cumplirse la ley y que se nos permita desarrollar todo nuestro potencial, porque es así como se garantiza el derecho a la protección de la salud de todas las personas. Tenemos una generación de profesionales más formada y altamente cualificada, pero con peores condiciones laborales, menos estabilidad, más incertidumbre y escaso reconocimiento. El sistema no posibilita ni valora el desarrollo del talento, la experiencia ni la especialización, lo que final desencadena en falta de motivación, desgaste y burnout», ha remachado Villaseñor.