El Bloque Nacionalista Galego (BNG) ha llevado a la Cámara del Parlamento de Galicia la situación de «precariedad» y «vulneración de derechos de los trabajadores y usuarios» de la residencia Concepción Arenal, un centro de mayores coruñés de titularidad pública cuya gestión ha sido privatizada.
La portavoz del BNG de derechos sociales, Olalla Rodil, ha denunciado que esta residencia «es conocida por estos continuos agravios, por incumplir los ratios de personal, además de por no tener personal de enfermería disponible las 24 horas, tal y como establece la normativa».
El centro, que perteneció al grupo Domus Vi, está gestionado en la actualidad por otra compañía. «Desde la entrada de la nueva empresa, que ha percibido unos nueve millones de euros públicos, los trabajadores han iniciado una campaña de movilizaciones para demandar el cumplimiento de sus derechos laborales», ha expuesto Rodil.
La parlamentaria del BNG ha explicado que el personal del centro, que se ve «sobrecargado», cuenta que «algunos usuarios bajan sin asearse a almorzar o, directamente, ya no bajan porque solo dos auxiliares deben levantar, asear y vestir a un total de 30 residentes dependientes».
«Reúnanse con la empresa y los representantes de los trabajadores», ha solicitado Rodil a la secretaria xeral técnica de la Consellería de Política Social, María Francisca Gómez Santos.
Asimismo, Rodil ha demandado conocer el número de inspecciones llevadas a cabo por la Consellería de Sanidade y si la Xunta ha realizado algún tipo de sanción frente a los continuos «agravios», preguntas que no han tenido una respuesta concreta del Gobierno del Partido Popular (PP).