El grupo municipal Marea de Vigo ha afeado este viernes al gobierno local que encabeza Abel Caballero que la ciudad olívica «es de las pocas grandes ciudades» del país que no ha puesto en marcha líneas de ayudas a pequeños empresarios y autónomos, como por ejemplo, los del sector de la hostelería.
En una rueda de prensa telemática, el portavoz del grupo, Rubén Pérez Correa, ha apuntado que ciudades como Lugo, Ferrol, o Valencia, sí han activado esos mecanismos de ayuda, y ha advertido de que «está muy bien» hacer reuniones con expertos, o con los representantes de los diversos sectores, «pero no hay una línea directa de ayudas». «Es momento de ponerse a trabajar, las grandes declaraciones están bien, pero es buscar titulares y no ponerse a lo concreto», ha añadido Pérez Correa.
Por otra, Marea de Vigo ha propuesto también la creación de un servicio que facilite la conciliación y la reincorporación paulatina de trabajadores, especialmente mujeres, en el marco de la ‘desescalada’ tras el confinamiento del estado de alarma por la crisis sanitaria del coronavirus.
Según ha apuntado la concejal Oriana Méndez, el ya existente servicio de atención a la infancia a domicilio podría servir de «modelo» para poner en marcha un servicio similar. A ese respecto, ha recordado que los menores de 6 años no van a volver a las clases en lo que queda de curso y eso, entre otras cuestiones, hace «imperiosa» la necesidad de facilitar esa conciliación.
CONCESIONARIAS
Finalmente, Rubén Pérez ha vuelto a incidir en que el gobierno local debe aclarar qué indemnizaciones se van a dar a las empresas concesionarias, porque se han acogida a ERTE y gran parte de los salarios (el principal coste en las explotaciones de los servicios) son asumidos por el SEPE, además de que se ahorrarán las cotizaciones a la Seguridad Social mientras dure el estado de alarma.
En ese sentido, ha cuestionado nuevamente por qué no se ha decretado la suspensión de esos servicios, para que los salarios, seguros o alquileres fueran asumidos por el Ayuntamiento. «Sería perverso que se les pagara indemnizaciones cuando el 80 por ciento de sus costes se lo están ahorrando», ha indicado.