La Confederación Intersindical Galega (CIG) de Navantia asegura que el acuerdo marco firmado este jueves entre el grupo naval público, Iberdrola y Windar confirma el proceso de transformación de las instalaciones de Fene en los últimos años, «alejándolas de su función de astillero» y «adaptándolas a la actividad de empresas privadas», mediante inversiones y alquiler de terrenos.
El sindicato reconoce que este proyecto supondrá una «importante carga de trabajo para muchos trabajadores y trabajadoras», pero se pregunta «quién aporta esos 36 millones de inversión y en qué proporción», en referencia a la adaptación de una nave en el interior de la factoría para fabricar las monopiles XXL para parques de eólica marina.
La CIG, además, se interesa por qué pasará en 2025, que es cuando en principio finaliza la vigencia de este convenio a tres bandas. «¿Qué tecnología se quedará en Fene cuando se vayan las multinacionales?», cuestiona la central nacionalista.
PRESENCIA DE LOS PRESIDENTES DE LOS COMITÉS
Además, el sindicato ha criticado la actuación de los presidentes de los comités de empresa de Navantia Fene y Ferrol, ambos de CC.OO., presencia de la que, denuncia, «los comités en ningún momento fuimos conocedores».
Para la CIG, la presencia de Adela López y Emilio García en el acto de ayer «no hace más que avalar la política tan agresiva con esta comarca» y, en todo caso, les afea que no hayan aprovechado la ocasión para «reivindicar» la carga de trabajo y las inversiones comprometidas.
«Muchos trabajadores (de la industria auxiliar) llevan en el paro un año», recuerda la central nacionalista, que incide en que dentro de los comités se acordó «acudir a eventos importantes en la comarca» para llamar la atención sobre la situación del sector naval.
«En un acto en el que coinciden la ministra de Hacienda y el presidente de la Xunta», explica la CIG, «las dos administraciones que tienen sumida a la comarca en este estado, ni siquiera se hace un comunicado recordando nuestras reivindicaciones.
Era el momento de reivindicar, no de moqueta», afirma antes de subrayar que el presidente del comité «no es un cargo sindical individual», por lo que «asistir o no a actos en representación del comité tampoco es una decisión individual».