Una exposición sobre María Vinyals y Ferrés ha sido inaugurada en el castillo de Soutomaior (Pontevedra), un edificio en el que esta autora nació en 1875 y del que fue propietaria. Así, se busca abordar la vida y obra de esta escritora, considerada como una de las pioneras del feminismo en Galicia.

De este modo, ‘Un sueño llamado Soutomaior: María Vinyals 1910-1917’ se centra en la etapa en la que la autora residió en el castillo junto a su segundo esposo, Enrique Lluria. Para ello, la muestra expondrá hasta el 29 de febrero varias fotografías de la familia y un libro de firmas de los visitantes, entre las que se encuentra la de Alfonso Daniel Rodríguez Castelao junto a un dibujo suyo inédito.

Así lo ha explicado el autor del reciente ensayo histórico ‘María Vinyals, la mujer del porvenir. Siete vidas bajo la sombra de un castillo’, Diego Piay. En una entrevista concedida a Europa Press, el escritor también ha relatado cómo las inclinaciones de esta autora y el temprano fallecimiento de su padre provocaron que se trasladase a Soutomaior para residir con su tío, propietario del espacio y marqués de la Vega de Armijo.

El ensayista ha indicado que su tío llegó a presidir el Consejo de Ministros y a celebrar distintas reuniones con políticos en el castillo, encuentros en los que Vinyals se mostró interesada desde niña.

EDUCACIÓN

En esa línea, Diego Piay ha puesto en valor la faceta polifacética de la autora. En concreto, ha apuntado que, durante su infancia en el castillo, comenzó a formarse distintas disciplinas, como la tecnología, la antropología y la literatura, así como que llegó a dominar el francés, el inglés, el alemán y el portugués.

Según recoge la investigadora Silvia Cernadas en su artículo ‘Una mujer para la Historia: María Vinyals, marquesa de Ayerbe’, esta escritora también se interesó por la literatura y la pintura, lo que la llevó a participar en exposiciones de Bellas Artes en Madrid en 1890 y 1895.

Además, su estancia en Soutomaior le permitió documentarse sobre la historia de la residencia, que posteriormente plasmó en su obra ‘El Castillo del Marqués de Mos en Sotomayor. Apuntes Históricos’, publicada en 1904. Unos años después, en 1908, la autora heredó el edificio tras el fallecimiento de su tío.

Tras contraer matrimonio con su primer esposo, Juan Jordán de Urríes, embajador de España en distintos países, como Portugal, se convirtió en marquesa de Ayerbe y comenzó a relacionarse con distintas personalidades e incluso miembros de la realeza lusa. El matrimonio tuvo un único hijo, Antonio, y, en 1908, el marqués falleció. Un año más tarde, María Vinyals pasó a ser la mujer del médico progresista Enrique Lluria, con el que tuvo otro hijo, Roger.

VERTIENTE FEMINISTA

Respecto a su interés en el feminismo, Diego Piay ha apuntado que su principal objetivo pasaba por trasladar la necesidad de que las mujeres recibiesen una «educación cuidada» para mejorar su posición en la sociedad. Así, ha puesto en valor su trabajo en defensa del acceso a la cultura y la educación por parte de este colectivo.

Sobre ese punto, el autor ha explicado que la obra autobiográfica ‘Rebelión’ (1905) «marca un paso fundamental» en la plasmación de las ideas feministas de María Vinyals y su apuesta por la extensión de la educación a las mujeres.

En ese sentido, Silvia Cernadas ha señalado a la autora en su artículo de investigación como «una de las introductoras del feminismo en Galicia» en un contexto en el que la figura de la mujer estaba relegada al hogar. Así, ha detallado que sus ideales evolucionaron hasta convertirse en una defensa del derecho al voto para las mujeres y de una «igualdad de oportunidades» para ambos géneros.

Precisamente, Cernadas ha recordado algunos de los artículos mediante los que Vinyals plasmó sus convicciones feministas, ‘La influencia social de la mujer’ (1905), ‘El voto de la mujer’ (1906) y ‘El voto femenino’ (1925), textos recogidos por la revista ‘Galicia’ de Buenos Aires, la publicación homónima de Madrid y ‘La correspondencia de Cienfuegos’.

De hecho, Piay ha apuntado que la marquesa de Ayerbe acudió a conferencias de Concepción Arenal junto a la escritora Emilia Pardo Bazán, con la que compartió una relación de amistad plasmada en un intercambio epistolar entre ambas. Además, se relacionó con la feminista Carmen de Burgos Seguí.

Asimismo, el autor ha valorado la figura de la autora gallega como conferenciante y ha indicado que llegó a defender la educación de las mujeres en múltiples ponencias. Así, ha puesto como ejemplo un discurso pronunciado por Vinyals en el Círculo de Artesanos de A Coruña, una entidad «masculinizada» en la época. No obstante, Piay ha recordado que la mayor parte de las conferencias de la escritora, cuya repercusión en los medios de comunicación ha destacado, fueron impartidas en Madrid.

La preocupación por la educación femenina que sentía María Vinyals la llevó a poner su patrimonio personal a disposición de entidades que la promovían e incluso a colaborar en la fundación de las mismas en Madrid.

INCLINACIONES POLÍTICAS

Adicionalmente, Diego Piay ha destacado la vinculación de la autora con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE), al que se afilió después de que lo hiciese su segundo marido. Así, durante el periodo en el que se residió de nuevo en el castillo de Soutomaior, transcurrido entre 1910 y 1917, recibió a distintos personajes, como el socialista Pablo Iglesias Posse y el pintor Joaquín Sorolla.

Posteriormente, el biógrafo ha relatado que las dificultades económicas en las que se vio envuelta la pareja propiciaron que esta se trasladase a Madrid y que el castillo saliese a subasta. Poco después, en 1919, ambos se mudaron a Cuba, junto al hijo que tenían en común y a una hija del anterior matrimonio de Lluria, Teresa.

Durante su estancia en el país caribeño, la pareja comenzó a formar parte de agrupaciones socialistas y la autora adquirió el sobrenombre de ‘Marquesa Roja’, según ha recogido Cernadas en sus investigaciones, por «sus ideas progresistas» en los ámbitos social y político.

Finalmente, tras los fallecimientos de su marido y su hijastra y el regreso de Roger a España, Vinyals cayó enferma. Poco después, gracias al apoyo de una asociación gallega de La Habana, que le financió el billete, consiguió regresar a la península ibérica y se instaló en Madrid, donde llegó a ser vista pidiendo limosna.

A partir de ese momento, Diego Piay ha explicado que ha sido complicado reunir información sobre la situación de la escritora, aunque sí se ha confirmado el fallecimiento de su hijo Roger y de otro de los de su marido, Enrique. Así, el autor del ensayo histórico sobre Vinyals ha apuntado que, aunque se ha fijado su fallecimiento en París en torno a los años 40 del siglo XX, no ha podido confirmar que se trasladase a Francia en esa época.

No obstante, ha puesto en valor su persistencia en la defensa de la cultura y la educación de las mujeres pese al deterioro de su situación económica y personal.