Solo el 44,74 por ciento de los electores del Censo de Residentes Ausentes (CERA) ha llegado a depositar el voto en las elecciones autonómicas celebradas este domingo en Galicia, lo que sitúa el nivel de votación en el 1,24 por ciento del total de electores con derecho a sufragio, según las cifras provisionales que las Embajadas y Consulados han facilitado al Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación.
En el caso de las elecciones gallegas, han votado 5.726 personas, de las cuales 4.888 lo han hecho por correo y 838 en urna en los Consulados. Así, han ejercido este derecho un 44,74 por ciento de las personas que solicitaron el voto para esta cita electoral. Es un 1,24 por ciento del censo exterior para este proceso, que asciende a más de 463.000 personas, el 17 por ciento del total del censo gallego.
El voto de la emigración ha caído de forma histórica. De hecho, el punto de partida fueron las 12.359 solicitudes del Censo de Residentes Ausentes (CERA), una cifra que es prácticamente la mitad que en la cita autonómica de 2016 y que es la más baja de todo este siglo.
En cuanto a las peticiones realizadas para votar (que no sufragios emitidos), en A Coruña se han contabilizado 4.609; seguida de Pontevedra, con 3.496; Ourense, con 2.818; y Lugo, con 1.436 peticiones de voto. A ellos, hay que sumar los votos de los residentes temporalmente en el extranjero, que alcanzan las 117 peticiones (62 en A Coruña; 30 en Pontevedra; 14 en Ourense y 11 en Lugo).
Por países, el mayor número de solicitudes del censo de residentes ausentes se ha registrado en Cuba, con 1.945 peticiones. Aunque el país con mayor número de electores es Argentina (con 1.444 peticiones de voto en estas elecciones para el 12 de julio), se queda por detrás de Venezuela (1.720) en solicitudes.
Por delante de estos dos últimos países del Cono Sur se encuentran Suiza, en donde se han contabilizado 1.773 solicitudes de voto; Alemania, con 1.195 solicitudes; y Francia, con 1.008 peticiones de voto por correo. De vuelta en Latinoamérica, Uruguay es el cuarto país del continente americano, con 771 solicitudes, en número de peticiones.
Pero estos datos se alejan de las solicitudes que hubo para los comicios del 25 de septiembre de 2016, que ya había sido el registro más bajo que se había contabilizado. En la cita anterior electoral, los electores residentes ausentes registraron 21.513 solicitudes, aunque, finalmente, únicamente se emitieron 10.777 votos, frente a los 5.726 que lo han hecho en esta ocasión.
LA PANDEMIA SE SUMA AL VOTO ROGADO
A las dificultades habituales que supone el voto ‘rogado’ para los residentes en el exterior –un sistema que en los últimos diez años ha hecho caer drásticamente el voto de los no residentes– este año se han sumado las restricciones derivadas de la pandemia de covid-19.
El colectivo ‘Marea Granate’ advirtió ya en mayo de la imposibilidad de desplazamientos en muchos países para llegar a los Consulados y, además, que los «servicios consulares están bajo mínimos o incluso no operativos». También alertó de las serias anomalías de funcionamiento en los servicios postales en todo el mundo, con nulas garantías de recepción y envío de la documentación electoral.
ELECCIONES VASCAS
En el caso de las elecciones vascas, han votado 2.672 residentes en el exterior, de ellos 2.279 por correo y 393 en urna. El porcentaje de voto efectivo sobre solicitudes es del 74,16 por ciento y supone un 3,52 por ciento del censo de residentes ausentes, que roza las 76.000 personas (un 4 por ciento del censo total).
De este modo, la participación de los residentes en el exterior ha vuelto a caer significativamente en ambos comicios. En Galicia los votos depositados suponen una caída del 47 por ciento respecto a los 10.800 de hace cuatro años. En el País Vasco en 2016 se contabilizaron 3.257 votos, de manera que la cifra supone una caída del 20 por ciento.