La Confederación Hidrográfica del Miño-Sil (CHMS) ha finalizado los trabajos de restauración forestal e hidrológica que durante las últimas semanas ha llevado a cabo en las zonas afectadas por los incendios que este verano registró la comarca de Valdeorras.
El objetivo de estas actuaciones, que han supuesto una inversión de 148.000 euros procedentes de las arcas del Ministerio para la Transición Ecológica, pretenden atenuar la degradación de los hábitats quemados, especialmente por los efectos de las intensas lluvias de este año.
Así pues, según ha explicado la CHMS en un comunicado, los trabajos fueron realizados por dos brigadas durante más de tres meses, en los que han priorizado la retirada de madera y tapones de zonas próximas a áreas habitadas con riegso de inundación y de ceniza en proximidades de captaciones de agua.
Además, también se procedió al troceado, apilado y retirada de árboles caídos, el desbroce selectivo de tramos o la retirada de restos de ramas y troncos, entre otros trabajos.
El presidente de la Confederación Hidrográfica Miño Sil, José Antonio Quiroga, ha señalado que las actuaciones persiguen «un doble objetivo», por un lado, despejar los cauces «en lugares críticos» y, por otro, evitar la llegada de cenizas a los ríos.
Los trabajos se ejecutaron en zonas montañosas con fuertes pendientes donde, por efecto del fuego, se redujo drásticamente la cubierta vegetal, lo que favorecía el flujo de líquidos y sólidos hacia los cauces.