El alcalde de O Saviñao (Lugo), Carlos Armesto, no tiene duda de la intencionalidad del incendio que este martes se declaraba en la parroquia de Rebordaos con unas 20 hectáreas quemadas: «Se ve claramente que es intencionado, porque hablamos sobre el corredor de la Diputación, pegado al embalse de Belesar, con tres focos distintos».
El regidor constata que el fuego, que está «apagado y perimetrado» –el último parte de la Consellería do Medio Rural, con datos hasta las 8,30 de la mañana, lo daba por estabilizado– y no ha afectado a viviendas, sino a «algunas viñas».
«No fue una gran extensión», asegura Armesto, que detalla que fue contenido por «medios aéreos, también con un buldózer», mientras que hay una brigada «enfriando la zona y hay unas carrocetas por si se produce un rebrote» de las llamas.
Aunque Armesto incide en que no afectó a una gran «extensión», sí que «en la ladera parecía más de lo que finalmente ha sido», para volver a insistir en la intencionalidad del fuego.
«Se planta fuego en tres sitios, dos fueron apagados rápidamente y el tercero fue más grande yendo hacía Rebordaos. No llegó a las casas y no hubo daños materiales importantes. Se puede dar por controlado», sentenciaba el alcalde de O Saviñao.