Los principales partidos gallegos engrasan estos días su maquinaria de cara a una campaña electoral con motivo de elecciones autonómicas que se desarrollará en un escenario inédito, marcado por la pandemia del coronavirus, y en el que la difusión mediática tendrá un especial papel.
A menos de un mes del arranque –el 26 de junio– una incógnita es qué sucederá con la sugerencia realizada por el PPdeG, en relación a la necesidad de que las fuerzas pacten el posible recorte a una semana de una campaña electoral que, por ley, dura 15 días; así como otras cuestiones, como por ejemplo, el papel que van a jugar apoderados e interventores en la propia jornada electoral.
Y es que, aunque el PPdeG lanzó la propuesta, de momento no ha tomado la iniciativa de llamar a la oposición. El PSdeG y Galicia en Común se han mostrado reacios, mientras que el BNG se ha abierto a reducir la campaña a 10 días a cambio de un debate televisado a doble vuelta.
Entre tanto, los populares mantienen que no tienen la cabeza en las elecciones y se limitan a avanzar que, llegado el momento, actuarán de forma «prudente y responsable», sin agotar los aforos que se permitan. Harán «muchos actos», pero con menor afluencia. Además, fuentes del PPdeG consultadas por Europa Press inciden en que Feijóo está «centrado en la gestión de la pandemia», por lo que su papel de candidato quedará «en un segundo término», al menos de momento.
En relación a las listas, el secretario general del PPdeG, Miguel Tellado, ha avanzado que no ve preciso introducir ningún cambio. Por ello, se prevé que el Consello de la Xunta cese a los altos cargos de la Administración autonómica que concurrirán en las candidaturas por las cuatro provincias.
SOCIALISTAS Y RUPTURISTAS REACIOS A REDUCIR TIEMPOS
Los socialistas gallegos, que rechazan la opción de reducir los 15 días por considerar que Feijóo intenta de este modo evitar el debate sobre su gestión, avanzan una campaña «propositiva» en la que irán incrementando actos conforme se camine en la desescalada.
Precisamente, el propio candidato del PSdeG, Gonzalo Caballero, ha asegurado que de cara a las autonómicas, contará con el apoyo de los miembros del Gobierno y de la dirección del PSOE. «Hay una capacidad de acción conjunta porque tenemos un claro compromiso con Galicia, conscientes de que para que a Galicia le vaya bien necesitamos un gobierno de progreso», ha sostenido.
De cara a la cita con las urnas a las que el PSdeG prevé llevar las mismas listas que en el 5A sin grandes cambios, Gonzalo Caballero reta a Feijóo a participar en cinco debates –dos cara a cara y tres con los grupos con representación– para que los ciudadanos puedan observar la confrontación de los distintos proyectos .
El candidato de la coalición Galicia en Común – Anova Mareas, Antón Gómez Reino, también rechaza reducir la campaña que subraya que «no es un capricho» de los partidos sino que «está legislada para que el conjunto de los gallegos puedan conocer la propuesta política» de cada candidatura y «tomar una posición».
Por este motivo, pide a Feijóo y al PP «que explique de una vez por todas cuál es su propuesta» para celebrar un proceso preelectoral que «cumpla con todos los derechos democráticos de los gallegos y con las garantías sanitarias». A partir de ahí, Galicia en Común tomará las decisiones sobre el tiempo y el modo en el que desarrollará este periodo.
EL BNG, 10 DÍAS Y DEBATES
El Bloque sí aceptaría reducir la duración pero lo condiciona a que exista un acuerdo entre las fuerzas para la celebración de un debate a doble vuelta entre los candidatos de los principales partidos en liza retransmitido por la CRTVG, que asimismo tendría que realizar un plan de cobertura acorde a la importancia del proceso y aumentar el tiempo dedicado a la información electoral.
Ana Pontón avanzó, además, que el Bloque, que ya ha ratificado que concurrirá con las mismas listas que el 5A, trabaja en la «redefinición» de su campaña para «poder conciliar» las medidas de seguridad con «el objetivo» de explicar el proyecto del frente nacionalista al conjunto de los gallegos.
EN MAREA
En Marea, que concurrirá en coalición con CxG y el Partido Galeguista, plantea actos «con muy poca gente» y «centrados en colectivos» concretos. Para ello, tal y como ha explicado el portavoz de la formación, Pancho Casal, apostarán por medios telemáticos, por la interacción a través de redes sociales e, incluso, por «pequeños actos» con personas en los que se cumplan «las medidas de seguridad» para evitar contagios.
Además, ha asegurado que el uso del papel será «absolutamente mínimo» y que los medios publicitarios que emplearán serán «a lo mejor un cartel en cada municipio» para dar a conocer la candidatura. «El planteamiento va a ser totalmente diferente a lo convencional», ha resumido.
CIUDADANOS
Tras ratificarse de nuevo el rechazo del PPdeG a ir en coalición con Ciudadanos, la formación naranja, cuya candidata será Beatriz Pino, ha empezado a articular actos con la militancia y augura una campaña «más mediática» y telemática que tradicional, pero su diseño aún está en marcha. Contemplan, eso sí, la posibilidad de realizar algún cambio en las listas que presentaron para el 5A por «cuestiones personales».
En cuanto a Vox, lo único que se ha ratificado por el momento es su intención de presentarse, pero no ha concretado si validará las candidaturas que presentó para abril.
ENTRE LA CAMPAÑA «EMOCIONAL» Y EL DISCURSO DE PROPUESTAS
A la espera de que los partidos vayan cumplimentando trámites y perfilen el diseño de sus campañas, politólogos consultados por Europa Press tienen posturas diferentes en relación a cuál será la mejor estrategia para los candidatos, aunque coinciden en que la agenda que focalizará el periodo preelectoral será el COVID-19 y se complicará colocar cualquier mensaje que en los distintos planos –sanitario, social o económico– no esté vinculado a la pandemia o la reactivación.
En esta coyuntura, Erika Jaráiz, del Equipo de Investigaciones Políticas de la Universidade de Santiago de Compostela, cree que habría que reforzar que los ciudadanos tengan «acceso directo» a los candidatos, por lo que sería positivo reforzar presencia en los medios, que serán «claves» en el desarrollo de esta campaña.
También augura que esta «será una campaña muy emocional». «Las emociones, reforzadas por la crisis, la situación vivida durante el confinamiento y una nueva normalidad que dista bastante de ser normal, tendrán un papel fundamental en la conformación del voto, por lo que las estrategias de los partidos deberían dirigirse a capitalizar dichas emociones», considera.
Desde la Universidade de Vigo, Enrique Varela, profesor del área de Ciencia Política y de la Administración, ve más relativo el papel de los medios y cree que puede funcionar mejor a la oposición un discurso propositivo que «desmonte» el papel de gestor de Feijóo. Eso sí, apuntan que deben ir «todos a una» y articular un discurso de «alternativa» a un PPdeG con mayoría absoluta o difícilmente tendrán opciones.
Por su parte, Álvaro Xosé López Mira, también profesor de la Universidade de Vigo en el área política, ha incidido en la presencia mediática de Feijóo, precisamente en el marco de gestión de la crisis sanitaria, por lo que considera que el candidato popular llegará al periodo formal preelectoral «con la campaña medio hecha». También ve difícil que los partidos se arriesguen con una estrategia convencional y coincide con sus compañeros en que el resultado, como poco, será incierto.