La recién constituida Plataforma en Defensa del CEIP Frei Luis de Granada de Sarria (Lugo) ha recogido más de 3.000 firmas, calculan que sobre «3.300», han puntualizado, para exigir a la Consellería de Educación que informe sobre las obras en el colegio, que han obligado a que las clases a los 377 niños matriculados se tengan que impartir en la Escuela Hogar.
Uno de los portavoces, Javier Pico, ha precisado que pretenden que por parte de la Xunta se les ofrezca información porque entienden que se «ha mentido y ocultado información» por parte de la Consellería sobre estas obras en el centro, que provocó que los padres no enviaran a clase a sus hijos durante un par de semanas.
También ha asegurado que la «principal reclamación es un colegio nuevo porque el Frei Luis de Granada presenta problemas estructurales», «así lo dicen los informes de la Xunta, con hormigones de mala calidad y no puede ser que la Xunta siga con parches en este colegio desde 2011», ha abundado. «Que de forma cíclica se produzcan fallos que puedan llevar a realmente un problema muy grave como puede ser el accidente de un niño o que caiga un voladizo y afecte a 7 o más niños», ha alertado.
En cuanto a la Escuela Hogar, Pico ha acreditado que «para los niños es muy incómodo, son aulas pequeñitas». «Mi hijo me dice que para salir del aula tiene que salir de lado porque si sale de frente se da con las sillas», ha descrito.
El portavoz de esta plataforma ha constatado que desde que se reiniciaron las clases en la Escuela Hogar, hace un par de semanas, «se han producido problemas de goteras, incluso un día se fue la luz en varias aulas».
«No es una situación ideal para que nuestros hijos reciban educación ahí, necesitamos aulas en condiciones y exigimos tanto al Ayuntamiento (de Sarria) como a la Xunta que esta situación, a partir de septiembre, tiene que estar solucionada. Los niños tienen que tener aulas dignas», ha reivindicado.