El Juzgado de lo Social número 1 de Ferrol ha declarado nulo el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) aplicado por la empresa Guidoni Quartz Spain en su fábrica del polígono de As Lagoas, en Narón (A Coruña), al considerar que las causas alegadas por la dirección no estaban debidamente acreditadas.
La sentencia judicial, que da la razón a las denuncias presentadas por el sindicato CIG, obliga a la inmediata restitución de los contratos de trabajo suspendidos. El ERTE, que se inició el pasado 20 de junio con una duración máxima de seis meses, afecta de manera rotativa a toda la plantilla, manteniendo actualmente a cerca de un tercio de los trabajadores en situación de suspensión de contrato.
Durante todo el proceso de negociación de la empresa dedicada a la fabricación de tableros de aglomerado de piedra, la CIG denunció la insuficiencia de la documentación y la falta de concreción por parte de la empresa.
El secretario comarcal de la Federación de Construcción y Madeira de la CIG en Ferrol, Marcos Sánchez, señaló que la dirección «no presentó toda la documentación establecida en la normativa» y que la información entregada fue «totalmente insuficiente».
Sánchez subraya que, a pesar de las reiteradas solicitudes, la empresa no acreditó de forma clara y concreta las causas organizativas y productivas, y tampoco especificó el número exacto de personas afectadas, su clasificación profesional o los criterios de selección.
REGRESO DE LOS TRABAJADORES A SUS PUESTOS
La sentencia obliga a la empresa a restaurar de forma inmediata los contratos suspendidos y al pago de los salarios dejados de percibir por los afectados, o el abono de las diferencias respecto a las prestaciones por desempleo que pudieran estar cobrando.
El sindicato avanza que, si bien el fallo puede ser recurrido ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), estarán «vigilantes a los movimientos de la empresa y actuaremos en consecuencia». La CIG insiste en la necesidad de implementar un plan de viabilidad e inversiones que garantice la continuidad de la actividad productiva y de los 122 empleos de la planta de Narón.