El presidente de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, ha anticipado «inversiones cuantiosas» para las ayudas post incendios que se lanzarán la semana que viene y que estarán dirigidas tanto al sector vitivinícola como a viviendas y a prevención.
Lo ha hecho en su visita este viernes a la bodega Tapias Mariñán, que forma parte de la Denominación de Origen (DO) Monterrei, y ha sido una de las afectadas por la ola de incendios que ha asolado la provincia de Ourense durante las últimas semanas.
En este sentido, ha señalado que la Xunta continúa evaluando «de manera global» los daños tras los incendios, en concreto, «lo que de tiempo a hacer estos días» para poder «lanzar las ayudas la semana que viene». «Las consecuencias de los fuegos hay que afrontarlas con diligencia», indica.
El máximo mandatario gallego ha recordado, además, que está previsto celebrar una reunión de su Gobierno en Ourense para esa gestión de ayudas. «La semana que viene aquí en Ourense haremos un consello para que las persoas damnificadas puedan empezar a pedirlas ya», ha explicado.
REUNIÓN CON LAS DO
En su visita, el presidente de la Xunta ha incidido en la necesidad de tener una reunión con las Denominaciones de Origen de la provincia de Ourense para «evaluar daños» que hayan podido afectar al consumo «a punto de empezar la vendimia».
«Los fuegos más importantes se produjeron en dos zonas vitivinícolas y por lo tanto hubo daños, es cierto que en algún caso los viñedos sirvieron de cortafuegos, pero en otros casos no fue posible salvarlos», ha añadido.
En compañía del presidente de la DO Monterrei, Manuel Vázquez, Rueda a aclarado que el sello se encuentra ahora «calculando el número de hectáreas» y «recogiendo datos» para poder hacer una estimación de los daños.
A la visita ha acudido también Aníbal Blanco, copropietario de la bodega Tapias Mariñán que ha lamentado, emocionado, que «el rural necesita apoyo». «La gente que trabaja en el campo tiene que tener un prestigio, una dignidad» reclama.
Con sus viñedos afectados por el fuego, Blando pide «respeto» frente a la «insostenibilidad» y la «incertidumbre» que viven los trabajadores del campo. «Es un orgullo trabajar del campo, es una profesión que disfrutamos» añade.
En total, dice, su bodega valora entre ocho y diez hectáreas de viña quemada, lo que corresponden a, aproximadamente, 100.000 kilos de uva «perdida» que suponen «pérdidas de producción» y «falta de comercialización». «Es nuestro patrimonio y es nuestra vida» recalca.
DAÑOS DIRECTOS
Rueda ha trasladado, además, la urgencia de «hacer frente a los daños directos» relacionados con los incendios en los municipios afectados. «Cuento con la ayuda de la Diputación de Ourense y también con la ayuda del Gobierno Central», destaca.
«Escuché al presidente del Gobierno que la semana que viene también van a convocar ayudas, bienvenidas sean, a ver cómo, entre todos, podemos llegar», ha añadido Rueda.
Ayudas que contarán, dice, con «inversiones cuantiosas» para las «directas» y para «lo que haya que hacer» en la prevención y en la mejora ante las consecuencias de los incendios.
«Además va a influir la meteorología de estos días, por un lado es bueno que llueva, pero por otro, si las lluvias son muy copiosas, darán problemas respecto a los terrenos quemado», ha explicado.
Indica que técnicos de la Xunta están «empezando a evaluar» los daños en viviendas, en concreto, valorando cuáles eran viviendas habitadas, primera vivienda y el «grado de daño» para dar «cuanto antes» las ayudas necesarias.
«Seguimos trabajando, la primera parte de eficacia es lanzar ayudas pronto, la segunda es pagarlas pronto, no tiene mucho sentido hacer una cosa sin hacer la segunda», ha añadido.