La organización ecologista Arco Iris anuncia que ha iniciado las «acciones oportunas» para personarse como «acción popular» en el proceso judicial vinculado con la necesidad de adoptar medidas «inmediatas» para salvaguardar el medio ambiente del entorno de Alcoa, en San Cibrao (Lugo).
«Medio Ambiente tiene ya en sus manos el informe remitido la semana pasada por el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), que alerta de la necesidad de adoptar medidas inmediatas para salvaguardar el medio ambiente del entorno de Alcoa en San Cibrao».
«La balsa de lodos de la compañía ocupa casi 90 hectáreas y cerca de 50 hectómetros cúbicos y alberga una auténtica bomba de relojería tóxica», sostiene la organización que añade que «se encuentra en estos momentos pendiente de ciertas mejoras técnicas para subir la cota del muro y prolongar una agonía ambiental única en España y Europa».
Los ecologistas, que instan a la Xunta a pronunciarse, creen que la «intención de Alcoa es prolongar la generación de lodos y su depósito en la balsa hasta el año 2035» y denuncian que esto supondría «acabar con toda una comarca y la vida marina en muchos kilómetros».