La sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo, juzgará a partir del próximo lunes, día 30 de septiembre, al joven que supuestamente mató a un hombre de 69 años de edad en su vivienda, ubicada en la calle Areal de la ciudad olívica.

El caso procede del Juzgado de Instrucción número 5 de Vigo y, para el varón, Fiscalía solicita hasta 11 años y medio de cárcel por un delito de homicidio y un delito continuado de estafa en concurso ideal con un delito leve de hurto. El juicio comenzará este lunes con la elección del juzgado popular y se prolongará durante toda la semana.

Según el escrito del Ministerio Público, todo comenzó el 28 de diciembre de 2021, cuando el acusado solicitó telefónicamente a una entidad bancaria dos tarjetas móviles asociadas a la cuenta del fallecido, realizando a partir de ahí distintos pagos esa noche en una discoteca.

«En un momento no concretado, pero comprendido entre las 20.30 horas del 28 de diciembre y las 18.00 horas del 29 de diciembre, encontrádose el acusado en compañía del fallecido, en el salón del domicilio de este último (…), con ánimo de causarle la muerte, le golpeó fuertemente en varias ocasiones con unas bolas decorativas de mármol que allí había, en la cabeza y en la cara, hasta que a consecuencia de los golpes cayó conmocionado al suelo, en donde con un cuchillo de cocina de hoja plana (…) y para rematarlo, le propinó un total de 21 cuchilladas, en cabeza, cara, cuello, zona cervical y tórax», recoge Fiscalía.

En la madrugada del 29 de diciembre, cuando ya era posible que el hombre estuviese muerto, «pero sin existir completa certeza de ello», el acusado, de 21 años de edad en el momento de los hechos, usó sus tarjetas de nuevo en la misma discoteca.

Días posteriores, realizó varias operaciones, debido a que había sustraído las llaves, el documento de identidad, la tarjeta sanitaria, el móvil y varias tarjetas de la víctima.

En total, hasta el 4 de enero de 2022, el acusado detrajo de la cuenta bancaria del fallecido más de 17.400 euros, de los cuales más de 17.200 euros fueron retirados tras producirse «con total seguridad» la muerte de la víctima.

Por todo ello, Fiscalía solicita 10 años y medio de cárcel por el delito de homicidio y un año de prisión por el de estafa. Así, tiene en cuenta el atenuante de reparación del daño, después de que el joven indemnizase a la hermana y heredera de la víctima con casi 22.000 euros y con más de 16.400 euros al otro hermano, renunciando estos a acciones civiles.