CIG-Saúde considera que los impuestos de la Xunta para 2024 son «una oportunidad perdida» en lo que se refiere a la planificación real de las necesidades de la sanidad pública, tanto para cumplir el acuerdo de reducción de jornada del 20 de abril de 2023, como para evitar que los cuadros de personal se mantengan al mínimo.
En concreto, en relación con la atención primaria reclama la puesta en marcha de las medidas previstas en el Plan de Ordenación de Recursos Humanos de Atención Primaria, que dice que no podrá ser aplicado sin un incremento del cuadro de personal con plazas de nueva creación.
También exige un análisis de ratios de personal hospitalario, acompañado de un impuesto específico para poder incorporar al personal necesario, puesto que, según el secretario nacional de CIG-Saúde, Manuel G. Moreira, conoce el «déficit de profesionales que existe».
Por otro lado, reclama la convocatoria de la Comisión de seguimiento del acuerdo de urgencias hospitalarias para evaluar «la situación de la sobrecarga», manifestando su desacuerdo con el procedimiento seguido para la elección de las 74 plazas de nueva creación.
Por eso, CIG-Saúde ha convocado una reunión urgente de la Mesa Sectorial en la que pretende que se justifique la selección de esas plazas de nueva creación incorporadas en los impuestos, y los motivos por los que no se tuvieron en cuenta otras necesidades del conjunto del sistema sanitario público.