A Coruña homenajeará a las víctimas del nazismo con la colocación de 17 ‘stolpersteine’. De esta forma, los coruñeses que fueron deportados a los campos de concentración en Alemania contarán con su particular adoquín de bronce ante los que fueron sus domicilios particulares en la ciudad herculina, que se convertirá en la primera en Galicia en tributar un recuerdo de este tipo.
Así lo ha anunciado la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, en la presentación de un proyecto conjunto entre el Ayuntamiento y la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH).
En el acto, en el que se ha recordado que este viernes, día 27, se celebra el Día Internacional en memoria de las víctimas del holocausto, han participado la portavoz en Galicia de la ARMH, Carmen García-Rodeja, y varios familiares de las víctimas.
«Nuestra previsión es que los primeros ‘stolpersteine’ comiencen a instalarse este mismo verano, aproximadamente en el mes de junio», ha puntualizado la regidora. Tras la instalación de los adoquines, según ha añadido, se prevé llevar a cabo recorridos guiados «de carácter didáctico e histórico».
LIBRO DE BIOGRAFÍAS
Además, la ARMH, con el apoyo del Ayuntamiento, publicará un libro con las biografías de cada uno de los coruñeses homenajeados. «Hay otros cuatro deportados coruñeses que cuentan ya con su correspondiente adoquín fuera de Galicia», ha recalcado.
Durante la presentación, el nieto de uno de los homenajeados ha explicado que las biografías de los protagonistas son «historias trágicas personales que trascienden mucho más», producto de unas circunstancias históricas «que no se deben olvidar». «Esta palabra impronunciable, ‘stolpersteine’, nos recuerda lo que pasó y que puede volver a pasar», ha sentenciado.
La portavoz de la asociación, por su parte, ha destacado que esta iniciativa es fruto de la investigación de un campo que estaba «desatendido» para la que han consultado archivos de España, Francia, Austria y Alemania, asociaciones de excombatientes y exiliados.
Los ‘stolpersteine’ –‘piedra que te hace tropezar’ en alemán– son una creación del artista alemán Gunter Demning. El primero se instaló en Berlín en el año 1992 y desde entonces, este proyecto ha llegado a más de 25 países con 75.000 réplicas de estos pequeños memoriales.