El Parlamento de Galicia acogerá esta semana, entre miércoles y jueves, un nuevo pleno en el que el BNG defenderá la toma en consideración de la que llaman ‘Lei Ángeles Alvariño’, para que «ninguna mujer tenga que escoger entre ser madre o científica».
Así lo explica la diputada nacionalista Olalla Rodil, quien afirma que esta proposición legislativa, que modifica la normativa autonómica anterior en esta materia, busca «acabar con la discriminación que a día de hoy sufren las mujeres investigadoras en Galicia».
Según sus palabras, sufren una «penalización» en las convocatorias públicas «por el hecho de ser madre y cuidar a su hija o a su hijo». Así, esta ‘Lei Ángeles Alvariño’ busca introducir mecanismos para evitarlo.
Y es que todo ello provoca una «discriminación por razones de género», añade Rodil, que conlleva una pérdida de «talento y valor fundamental para el desarrollo social, económico y cultural» de Galicia.
Según cifras del BNG, en la Comunidad gallega «apenas el 27 por ciento de las universitarias cursan carreras científicas o técnicas», mientras que «solo dos de cada diez cátedras» del Sistema Universitario Galego (SUG) están ocupadas por mujeres.
«Por eso tenemos que avanzar en la corresponsabilidad y suprimir las barreras que impiden competir en condiciones de equidad a las mujeres. Y ese es el objetivo de esta proposición de ley», explica Olalla Rodil.
La ‘Lei Ángeles Alvariño’ toma su nombre de una gallega «pionera» en la oceanografía en los años 70 en Estados Unidos y «referente» en la lucha contra la discriminación de las mujeres.
MEDIDAS
En este contexto, el Bloque destaca que el texto que defenderá en la Cámara recoge medidas que garanticen una «igualdad que a día de hoy la Xunta no garantiza» en el acceso a las convocatorias de investigación, organismos y entidades del sistema gallego de I+D+i.
De hecho, Rodil explica que la propuesta legislativa pone el foco en la discriminación por maternidad, al tiempo que apuesta por «dar visibilidad» al trabajo de las investigadoras con la creación de cátedras de género, con un apoyo a la participación en órganos colegiados y potenciando la vocación científica de las mujeres.
«Es una proposición de ley pionera para seguir avanzando en una sociedad más justa y democrática», resume la diputada nacionalista.