El vicepresidente de la Xunta en funciones, Alfonso Rueda, ha asegurado este miércoles que el Gobierno gallego será «estricto» a la hora de analizar la autorización del ERE de Alcoa y le ha pedido a la empresa que «siga negociando» de cara a lograr una posible venta de la planta.
En declaraciones a los medios, Rueda ha explicado que, como autoridad laboral, la Xunta busca «ganar tiempo» para «seguir negociando» y ha garantizado que serán «muy estrictos a la hora de analizar» el ERE solicitado por la empresa.
«Si hay posibilidad de adquisición de la empresa, hay que acreditar que se negoció hasta el último momento y el modo de negociar es tener más tiempo», ha dicho Alfonso Rueda, que ha pedido a Alcoa que «siga negociando» y «no plantee» el ERE como «solución definitiva» hasta que sea «irremediable». «Creemos que todavía hay tiempo para encontrar una solución», ha dicho el vicepresidente en funciones.
No obstante, Rueda ha condicionado esta búsqueda de «soluciones» a la consecución del estatuto de los consumidores electrointensivos, algo «fundamental». «Nosotros haremos nuestra parte, pero el Gobierno tiene que hacer la suya, y, si no la hace, será imposible que lleguemos a una solución», ha zanjado.
El vicepresidente en funciones ha recordado que, para la planta de Cervo «se va acabando el tiempo» y ha exigido al Ejecutivo central que «apruebe un marco eléctrico» adecuado, un documento que el Gobierno «pasó de prometerlo» y «decir que ya lo tenía listo» a «un silencio cada vez más preocupante».
«Sin ese estatuto tantas veces prometido y tantas veces incumplido por parte del Gobierno central no hay manera, sería imposible», ha dicho Alfonso Rueda, en referencia a la continuidad de la planta.