La plataforma ‘Justicia para Diego’ ha elaborado un vídeo para exigir «respuestas» por la muerte del joven coruñés en Filipinas el pasado mes de enero y para seguir «recordando» su caso pese al confinamiento, según han apuntado a Europa Press fuentes de la familia
«Estamos confinados, pero no mudos», comienza el vídeo a cargo de distintas personas de diferentes nacionalidades y entre las que se encuentran amigos y allegados.
En él, subrayan que siguen «pidiendo respuestas». «Cuatro investigaciones abiertas en Filipinas, sin culpables, más de tres meses esperando los resultados de la autopsia», añaden.
Por ello, afirman que tanto su familia como amigos quieren saber «quién ordenó su asesinato». «Seguimos aquí, no descansamos», apostillan en un vídeo en el que inciden que llegarán «hasta el final» para aclarar lo sucedido. La grabación concluye con un cartel reclamando de nuevo «justicia» por la muerte del joven coruñés.
«LIMPIAR» SU HONOR
En una concentración celebrada en A Coruña un mes antes de que se declarase el estado de alarma, Bruno Bello ya remarcó que no pararían hasta que el nombre de su hermano quedará «limpio de toda duda sobre su honorabilidad» después de que la policía filipina lo considerase «sospechoso» de tráfico de drogas, algo que desde el primer momento han rechazado amigos y familiares.
Como sus allegados, desde la plataforma ‘Justicia para Diego’, se reclamó al Gobierno que la muerte de Diego Bello fuese considerada «un asunto de Estado», al tiempo que pidieron ayuda de otros organismos internacionales «para aplicar las sanciones correspondientes a Filipinas».
La muerte de Diego Bello se produjo en una operación en su domicilio en la localidad de General Luna, en Siargao. La Policía lo mató a principios de enero en un tiroteo registrado en el sur del archipiélago filipino.