Varios dispositivos para la prevención del furtivismo llevados a cabo por la patrulla Seprona (Paprona) de la Guardia Civil de Corcubión han dado como resultado la aprehensión y entrega al centro benéfico de Cáritas en Cee de 150 kilos de pulpo al carecer las personas que transportaban dicho cefalópodo de un documento que acreditara la legal tenencia.
El primero de los operativos se llevó a cabo en la zona de Lira, en Carnota (A Coruña) cuando una patrulla se percató de como un barco, con base en dicho puerto, descargaba varios capachos llenos de pulpo en una furgoneta isoterma. También constataron que salió rápidamente del recinto portuario sin pasar por lonja, a pesar de que estaba abierta.
Por este motivo, se procedió a interceptar dicha furgoneta para comprobar lo transportado y su procedencia, corroborando que se trataba de pulpo, en concreto 55 kilos. Al ser solicitado el documento de transporte que ampare dicha mercancía fuera del recinto portuario, el transportista, vecino de Lira, manifestó carecer de ella.
El segundo operativo se llevó a cabo en la zona de Fisterra cuando estos mismos agentes se percataron de la presencia de un barco descargando en un puerto, sin tener autorizada la descarga.
Por ello, se interceptó la furgoneta al salir del lugar, localizando tres cajas con pulpo con un peso de 95 kilos. Al transportista, vecino de Fisterra, se le realizó la correspondiente acta-denuncia y la mercancia se entregó a Cáritas-Cee. También se formularon denuncias que serán enviadas a la Consellería do Mar.
INCAUTACIÓN DE PERCEBE
Por otra parte, el Servicio Marítimo Provincial de A Coruña, en el transcurso de un operativo de prevención del furtivismo en las inmediaciones del puerto de Santa Mariña-Camariñas, procedió a la aprehensión de 14,3 kilos de percebe, después de observar como dos personas se encontraban realizando la actividad marisquera con equipos de respiración autónomo desde una embarcación de recreo.
Por infracción a la Ley de Pesca de Galicia, por marisqueo furtivo, se formuló denuncia contra dos vecinos de Camariñas, de 29 y 35 años. Asimismo, se formalizó denuncia por incumplir el confinamiento.