Agentes del Subsector de Tráfico de Ourense han detectado en un control de tránsito de vehículos en la tarde de este martes a un ciudadano brasileño con una orden de expulsión del país, y quien ya había sido expulsado en 2006 y en 2009, que incumplía la orden de confinamiento.
Según ha informado el Instituto Armado, agentes del Subsector de Tráfico de Ourense que realizaban a las 18,30 horas de este martes un punto de control del tránsito de vehículos en AG-53, por las restricciones de desplazamiento impuestas por el estado de alarma, observaron un vehículo Suzuki Vitara con matrícula 3647-FLC, con dos ocupantes en las plazas delanteras, en contra de lo previsto para desplazamientos en turismos conforme a los protocolos de salud pública establecidos.
Una vez identificado el conductor, «quien no pudo acreditar debidamente el motivo del desplazamiento», han explicado las mismas fuentes, se procedió a la identificación del acompañante, el cual alegó no portar tipo de documentación alguno, si bien facilitó algunos datos personales de palabra. Al «no ofrecer garantía suficiente», indica la Benemérita, agentes se desplazaron al domicilio indicado por el individuo.
Cotejados los datos aportados a priori por este ciudadano procedente de Brasil; según base de datos policial se constata Orden de Expulsión de España en vigor. Así, personados agentes en el domicilio de esta persona, ubicado en el casco urbano de la ciudad de Ourense, y verificada su identidad mediante pasaporte como Manuel María B.S., de 59 años y procedencia brasileña, se constata que esta persona se encontraba en situación irregular en el país y que ya había sido expulsada con anterioridad del territorio nacional en 2006 y 2009.
Dada la circunstancia acaecida se requirió en el punto a agentes de Policía Nacional de la Comisaría de Ourense, para el traslado de esta persona a dependencias policiales y posterior realización de las actuaciones en materia de extranjería.
INCUMPLIMIENTOS
Los agentes de la Guardia Civil, por otra parte, procedieron a la confección de sendas actas de denuncia, a la Subdelegación de Gobierno, por incumplir la obligación de no transitar por la vía pública, salvo los casos previstos como excepción, así como por hacerlo de forma indebida para desplazamientos conjuntos en un solo vehículo.
La Guardia Civil insiste en su «reconocimiento al compromiso de la población» y anima a los ciudadanos «al firme cumplimiento de las directrices, que con imperiosa necesidad han sido impuestas, en aras al sentido común, por y para el bienestar de todos».