La Guardia Civil de Lugo ha imputado en calidad de investigado a un joven de 20 años como presunto autor de tres delitos contra la seguridad vial y otro de atentado a los agentes de la autoridad.
Según ha informado el cuerpo, los hechos sucedieron en el mes de diciembre, cuando en un punto de verificación de alcohol y drogas en las proximidades de la localidad lucense de Muimenta identificaron al infractor.
El conductor fue sometido inicialmente a la primera de las pruebas reglamentarias de detección alcohólica, en las que arrojó una tasa positiva, pero antes de realizar la segunda prueba, que es preceptiva, arrancó el vehículo e inició la marcha conduciendo de un «modo temerario».
Estos hechos produjeron un «evidente riesgo» para la integridad física de uno de los agentes que se encontraba en la proyección de la parte delantera del vehículo y que tuvo que saltar fuera de su trayectoria para evitar ser atropellado.
Con esta huida, puso en peligro vital a uno de los agentes y además impidió la realización de las pruebas de detección de alcohol y drogas, ya que, en un principio, no pudo ser localizado.
A raíz de los hechos, comenzaron una investigación que estuvo dificultada porque el conductor no presentó documentación personal alguna y solo se limitó a facilitar datos parciales de su identidad a la patrulla actuante.
En el desarrollo final de la investigación, gracias a los datos identificativos parciales dados por el conductor y a los detalles físicos descritos por los agentes que intervinieron, pudieron identificarlo.
Así las diligencias instruidas por los agentes fueron entregadas en el Juzgado de Instrucción de Guardia de los de Vilalba (Lugo).