La Policía Local de Lugo intervino el miércoles en un accidente en una rotonda y detectó que uno de los conductores implicados, el que había provocado el choque, circulaba ebrio: dio un valor de 0,92 en el test de alcoholemia, casi el cuádruple de la tasa máxima permitida.
Según el parte de incidencias del cuerpo municipal, el siniestro sucedió en la rúa Industria. Allí, un turismo que estaba detenido para entrar en una rotonda fue golpeado por otro que dio marcha atrás y embistió contra su defensa con el gancho del remolque.
Una vez el Equipo de Atestados de la Policía Local se presentó en el lugar, vio signos evidentes de que el conductor del coche que había provocado el golpe se encontraba bajo los efectos de bebidas alcohólicas.
Los agentes le realizaron el correspondiente test, en el que arrojó un positivo de 0,92 miligramos por litro en aire respirado, cuando el máximo permitido es 0,25.
Por lo tanto, la Policía instruyó diligencias por un delito contra la seguridad viaria en la modalidad de juicio rápido. Además, su vehículo fue inmovilizado.
CONTROLES DE VELOCIDAD
A lo largo del miércoles, 15 de noviembre, el cuerpo municipal desplegó un dispositivo especial de tráfico en carreteras en las que se detectó un incremento de accidentes de circulación y la velocidad máxima está establecida en 50 kilómetros por hora.
Este despliegue permitió controlar la velocidad de un total de 1.434 coches, de los cuales 57 fueron denunciados.