Rescatados los supervivientes y recuperados los cuerpos de las víctimas del accidente de Cerdedo-Cotobade, uno de los elementos principales en los que trabajan los expertos es en la recuperación del autobús, que permanece semisumergido en el cauce del río Lérez y que, estiman, podría dar claves para el análisis de las causas del siniestro, que se ha saldado con siete muertos y dos heridos.
Tal y como han explicado este lunes, en el lugar del accidente, el delegado del Gobierno, José Miñones, y el alcalde de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, se están realizando ya las pruebas de carga en el puente desde el que cayó el autobús para determinar si podría con el peso de una grúa para retirar el vehículo.
«Tiene que venir una grúa de mucho peso y están valorando si el propio puente podría aguantar el peso», ha dicho Cubela. Al peso de esta grúa, ha recordado el delegado del Gobierno, se sumaría el del propio vehículo y el de «la fuerza del agua», en caso de que el rescate del autobús sea viable de este modo.
Inicialmente, ha explicado José Miñones, el Ministerio de Transportes trabaja para recuperarlo íntegro, pero no descartan fraccionarlo si, finalmente, no hay otra opción viable. «Está todo abierto», ha explicado en el punto del siniestro.
Otro de los factores que preocupan a los expertos es el elevado nivel del caudal del Lérez, que ejerce una fuerza importante sobre el vehículo. «El caudal del río hace difícil esta labor, porque la presión es mucha», ha detallado Miñones, que ha incidido en que el tiempo dará estos días «una ventana» sin lluvias para bajar el nivel del agua.
Con ello, confían en que «el miércoles o el jueves» el caudal del río «baje» y se pueda «aprovechar para hacer ese rescate», ha añadido Miñones.