Dos vecinos de la localidad pontevedresa de Bueu han sido identificados por la Guardia Civil, uno de ellos detenido y el otro investigado penalmente, como presuntos autores de un delito de espionaje industrial tras supuestamente instalar cámaras en una empresa de la comarca de O Morrazo.
Estas dos personas, a las que se les vincula también con un delito contra la propiedad industrial, se les acusa de haber colocado dos cámaras de vídeo vigilancia en el interior de la nave de una empresa dedicada a la elaboración de cebos para la pesca, con la presunta intención de revelar el secreto comercial en relación con la fabricación de dicho cebo.
La investigación comenzó cuando el propietario de la compañía detectó una de las cámaras y lo denunció ante la Guardia Civil. Fueron los agentes los que localizaron una segunda cámara, pese a que solo una de ellas podía ser visionada a través de control remoto.
Los efectivos detuvieron ‘infraganti’ en el interior de la empresa a uno de los investigados cuando se disponía a cambiar la batería de una de las cámaras que se había apagado, tratándose de un vecino de Bueu con numerosos antecedentes policiales, según ha indicado la Benemérita en un comunicado.
Tras ello, se identificó a otra persona, también de Bueu, encargada de visionar por control remoto las imágenes a través de su teléfono móvil.
Además, la investigación pudo determinar que ya habían establecido relaciones comerciales con las empresas proveedoras de los productos que utilizaba el denunciante para elaborar el cebo.
Por todo ello, las diligencias instruidas se entregaron en el Juzgado de Instrucción de guardia de Marín, donde deberán comparecer los presuntos autores cuando sean requeridos por la autoridad judicial.