La Universidade de Santiago de Compostela ha aprobado una resolución rectoral por la que se establece un protocolo marco con directrices para la reactivación progresiva de la actividad administrativa e investigadora de forma presencial en la institución, en la línea del plan de tránsito hacia la ‘nueva normalidad’ aprobado por el Consejo de Ministros.
Estas instrucciones no afectarán a la docencia, que se mantendrá de forma telemática, sino que están encaminadas a autorizar la apertura de las instalaciones y la reincorporación de personal para los casos en los que no sea posible la actividad no presencial, siempre en función de las recomendaciones sanitarias y la seguridad laboral de los trabajadores.
Según informa la institución compostelana, el protocolo define las diferentes responsabilidades del personal encargado de la reactivación y los canales de comunicación interna para coordinar estas tareas.
El responsable de cada área de servicio elaborará su propio plan de reinicio y la organización de turnos de personal, y espacios de trabajo en función de las medidas de distanciamiento y seguridad por las circunstancias sanitarias. Este documento tendrá que ser remitido con una antelación mínima de tres días hábiles a la fecha en la que pretenda retomar la actividad.
La reincorporación tendrá que compatibilizarse con las obras de mejora y reparación de edificios programadas en la institución, buscando una baja ocupación para garantizar las medidas de seguridad y permitir, además, la adaptación a las circunstancias de la fase en la que se encuentre cada localidad.
La resolución afecta a la actividad investigadora que requiera presencia en laboratorios, la administrativa y de apoyo, o a aquella necesaria para el desarrollo de funciones esenciales, de carácter asistencial (Medicina, Odontoloxía, Psicoloxía, Óptica e Optometría), al Rexistro Xeral, al préstamo en Biblioteca, Arquivo Histórico Universitario o actividad deportiva sin contacto y sin público.