El Servizo Galego de Saúde (Sergas) está instalando en sus hospitales 180 equipos sanitarios adquiridos por Abanca, en una compra destinada a reforzar la capacidad de los centros públicos gallegos frente a la COVID-19.
Según ha explicado la entidad, el material clínico incluye 39 unidades individuales de cuidados intensivos (ventiladores SV), 90 monitores PM10, 22 monitores PM12, 20 desfibriladores D3 y 9 ecógrafos TE7. En las próximas semanas serán instalados otros 334 equipos.
Esta dotación de soporte vital se ha distribuido en función de las necesidades actuales del Sergas en las áreas sanitarias de A Coruña y Cee, Santiago y Barbanza, Vigo, Pontevedra y O Salnés, Lugo, A Mariña y Monforte de Lemos, Ferrol y Ourense, Verín y O Barco de Valdeorras.
El pedido inicial, por importe de 4 millones de euros, incluía 150 unidades de cuidados intensivos. Sin embargo, las nuevas condiciones del mercado permiten ampliar el lote adquirido por Abanca para el Sergas, que ha sumado 364 dispositivos entre los que se incluyen monitores multiparamétricos, monitores de constantes vitales, desfibriladores y ecógrafos de alta prestación.