El alcalde de Vigo, Abel Caballero, ha defendido este jueves la conveniencia de hacer la ‘desescalada’ de medidas de confinamiento (implantadas por la pandemia de coronvirus) desde el ámbito provincial porque «no tendría lógica separar las áreas de Vigo y Pontevedra».
Así lo ha trasladado el regidor olívico en una rueda de prensa telemática en la que ha señalado que el provincial es «el mejor nivel» para iniciar esa ‘desescalada’, ya que el ámbito de actuación debe ser el que marca la movilidad. «Aquí no tendría lógica una ‘desescalada’ a velocidad distinta en Vigo y Pontevedra (…), estamos a 12 minutos de distancia», ha añadido.
Abel Caballero ha subrayado que «hay mucha gente moviéndose» entre ambas áreas, y existe una integración «económica y sociológicamente». «Parece lógico que vayamos juntos en la desescalada», ha reiterado, y ha precisado que eso no significa que no sea «bueno» tener en cuenta las áreas sanitarias, pero en el caso de Vigo el ámbito provincial sería el más adecuado.
Por otra parte, y con respecto a esas medidas de alivio del confinamiento, el alcalde ha confirmado que, desde este viernes 1 de mayo e, inicialmente, todos los domingos y festivos, se peatonalizarán tramos de calles en distintos barrios de la ciudad (centro, Teis, Balaídos, Bouzas, zona de Povisa, Urzáiz, Torrecedeira y zona de la estación de buses), de modo que los peatones puedan usar la calzada para aumentar la distancia social con respecto a otros viandantes. En esas zonas, se permitirá el acceso de vehículos a los garajes, pero la velocidad máxima del tráfico rodado será de 10 kilómetros por hora.
Asimismo, se ha decidido la reapertura de paseos y zonas verdes, como el parque de Castrelos y el del Castro, el paseo del Lagares y el de Bouzas, y las playas, aunque se vigilará que se mantengan las distancias y solo podrán acudir los vecinos de esas zonas. «Quiero evitar un ‘efecto llamada’, si veo que hay aglomeraciones, los vuelvo a cerrar», a proclamado el alcalde.
Finalmente, y con respecto a la posibilidad de establecer turnos para las salidas a las calle, Caballero ha señalado que, a pesar de que «lo mejor sería que cada alcalde pudiese decidir en su ciudad», las posibles restricciones serán establecidas por el Ministerio de Sanidad. «Es una restricción de derechos fundamentales, que un alcalde no puede hacer (…), los técnicos me dicen que es complicado jurídicamente», ha aclarado.