La Diputación de Lugo ha informado de que este lunes han comenzado los trabajos de limpieza y desinfección con carácter preventivo que se realizan en los cuatro centros de atención a mayores del organismo provincial, situados en los ayuntamientos de Pol, Trabada, Ribadeo y A Fonsagrada.
Con esta medida, por encima de los propios protocolos establecidos por las autoridades sanitarias contra el COVID-19 en este tipo de instalaciones, la Diputación busca «extremar las precauciones para minimizar el riesgo de contagio en las residencias, tanto de las personas mayores usuarias como de los profesionales que las atienden».
Las labores de desinfección se desarrollarán, al menos, mientras permanezca el estado de alarma. Cada uno de los centros se limpiará dos veces a la semana y los trabajos se harán de forma exhaustiva, tanto en el interior como en el exterior de los edificios.
El organismo provincial ha hecho hincapié en que es «fundamental proteger a las personas mayores», ya que «son las más vulnerables, junto a las que padecen patologías previas, frente a esta pandemia».
Desde antes de la declaración del Estado de Alarma, los cuatro centros de atención a mayores de la Diputación implantaron un protocolo específico de medidas contra el COVID-19 elaborado por personal técnico del área de Promoción Económica y Social, basado y en cumplimiento de la normativa, instrucciones, protocolos o guías publicadas por las autoridades competentes.
Entre esas medidas, se encuentra la prohibición de visitas de amigos y familiares, y también el refuerzo del servicio de limpieza, prestando especial atención a las zonas de acceso y salida de los sectores de aislamiento, escaleras, puertas, ascensores, zonas de deambulación, entre otras, para reducir el riesgo de transmisión.

