El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, ha aclarado que uno de los factores fundamentales que determina la «prioridad» en las pruebas que detectan el coronavirus es la edad, aunque también se da preferencia a otros colectivos que pueden participar, por ejemplo, en el servicio público, como puede ser el caso de miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad.
Al término de su reunión con los representantes de las fuerzas políticas gallegas para abordar el aplazamiento electoral, a preguntas de los medios, ante los que ha comparecido por vía telemática, Feijóo ha explicado que «la prioridad» –a igualdad de síntomas y si no hay indicios de gravedad– para la realización del test a domicilio «es la edad».
Así, se realizaría antes el test a una persona mayor que «a otra de 30 años o a un adolescente», que quedarían «para el final del desplazamiento a domicilio por criterio lógico y médico».
Adicionalmente, Feijóo ha precisado que hay personas que pueden estar trabajando en el servicio público, que aparecen con síntomas «y se van a su casa» como es el caso de miembros de fuerzas y cuerpos de seguridad. Según Feijóo, el delegado del Gobierno en Galicia, Javier Losada, le trasladó que cuenta con «personas confinadas en casa con dudas».
«Los necesitamos y tendrán prioridad», ha dicho Feijóo, quien ha señalado que «la media es de tres o cuatro días para realizar ese test», aunque «puede haber gente que tenga que esperar más porque se prioriza a mayores».
Criterio al margen merecen aquellas personas que experimentan síntomas graves como una fiebre mayor de 38 grados y disnea.
EL RIESGO DE DEJAR DE HACER LA PRUEBA: MAYOR CONTAGIO
Feijóo ha subrayado reiteradamente en su intervención que Galicia pretende seguir haciendo pruebas a domicilio «sin límite» si cuenta con la dotación de material preciso que, por otra parte, ha vuelto a urgir vía a carta al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. Cuenta con laboratorios de microbiología «preparados» y es la voluntad política, ha garantizado.
Y es que, bajo su punto de vista y tras la consulta a expertos sanitarios, ha advertido que dejar de hacer estos test eleva el riesgo de contagio.
«Por eso, cuando alguien tiene síntomas, lo que debe hacer es aislarse de sus familiares y tratar de estar en una habitación. Si no tiene 38 grados y disnea, lo único que puede pasar es que tenga ese virus y su sistema inmunológico lo esté venciendo. Al cabo de 14 días, se podría considerar que superó la enfermedad», ha zanjado.