La presidenta de Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Isabel Pardo de Vera, ha señalado este domingo que «si las pruebas a Puebla de Sanabria (Zamora) van tan bien y en los próximos meses ponemos en servicio ese tramo desde Pedralba», Galicia «podría tener la puesta en servicio» del AVE en la primavera de 2021.
Así lo ha apuntado en una entrevista en la Cadena Ser, recogida por Europa Press, en la que ha aclarado que llegaría en esta fecha «a no ser que haya alguna incidencia gorda durante las pruebas, posibilidad que cada vez se minimiza más».
La presidenta de Adif ha explicado que las actuaciones de estos últimos meses, relacionadas con las pruebas del Sistema Europeo de gestión del tráfico ferroviario (ERTMS) del tramo Zamora-Pedralba hasta Puebla de Sanabria, «van muy bien».
En esta línea, Isabel Pardo de Vera ha indicado que este trayecto se pondrá en marcha «en mayo o junio» de este año, lo que reducirá en 50 minutos el trayecto a Madrid, y que en 2020 también probarán el tramo de Puebla de Sanabria a Ourense.
Asimismo, ha hablado sobre los tiempos de los futuros viajes, que durarán sobre dos horas y 15 minutos en el tramo Madrid-Ourense, dos horas y 40 minutos desde Madrid a Santiago y media hora más a A Coruña.
«EL AVE ES YA UNA REALIDAD»
Por otro lado, Pardo de Vera considera que el Gobierno gallego utiliza la polémica sobre la fecha de llegada del AVE a la Comunidad con «intencionalidad política» y trata de «generar incertidumbre sobre una realidad que perjudica al ciudadano». A su juicio, «el conflicto no aporta nada» y ha dejado claro que «el AVE ya es una realidad».
Además, ha subrayado que en el pasado, cuando entre 2014 y 2017 se «paralizaron» las obras de este proyecto ferroviario durante el Gobierno de Mariano Rajoy, el Ejecutivo gallego a cargo de Núñez Feijóo «podía haber hecho algún trabajo».
Respecto a la propuesta de la Xunta de crear una comisión de seguimiento de la construcción del AVE, Pardo de Vera ha recordado que «nunca hubo ninguna comisión solicitada por la Xunta», ni siquiera cuando existió «riesgo sobre la ejecución de las obras en otros periodos».
En cualquier caso, ha recalcado que la máxima de la entidad «es la transparencia y la comunicación» y asegura no tener «problemas» para «dar todas las explicaciones» que se le requieran.