El Juzgado de lo Penal número 2 de Ferrol ha dejado visto para sentencia el juicio celebrado en la mañana de este lunes contra Alfredo Sánchez Chacón, conocido como el ‘Rambo gallego’, por su presunta autoría en cinco delitos cometidos en la comarca entre finales de 2021 y principios de 2022.
La vista, que comenzó a las 10:30 horas, media hora más tarde de lo previsto, a consecuencia de un accidente de tráfico que retrasó el furgón de la Guardia Civil que traslada al acusado, estuvo marcada por la declaración del propio acusado, quien, defendiéndose a sí mismo después de que el tribunal denegase su petición de cambiar de abogado, relató ante el juez una historia de supervivencia extrema.
Sánchez Chacón afirmó que, durante aproximadamente once meses, vivió en los montes de la zona, pasando frío y hambre, y que solo se acercó a garajes y viviendas por «necesidad» para refugiarse y encontrar comida.
«Estaba muerto de frío y de hambre. (…) Había una puerta abierta y me metí dentro, pero en el garaje. Estaba abierta para resguardarme del frío y coger un poquito, a ver si había algo de comer», declaró el acusado sobre los hechos ocurridos en una propiedad de Cabanas (A Coruña) y semanas después en una de San Sadurniño.
A renglón seguido, reconoció haberse llevado una cartera que encontró, pero insistió en que su intención inicial no era robar: «No fui con la idea de coger la cartera. Fue por necesidad».
VERSIÓN DE LA FISCALÍA
Por su parte, la Fiscalía sostiene que los hechos constituyen delitos de robo con violencia y resistencia a agente de la autoridad. En su informe, el Ministerio Público se refirió a un incidente en el que el acusado habría golpeado con un bastón a una persona que lo sorprendió en un garaje de San Sadurniño, y que el propio Sánchez Chacón describió como un acto de defensa propia tras ser agarrado del cuello.
Por otra parte, uno de los testigos, un guardia civil, que fue quien lo detuvo en la zona de O Calvario, en la parroquia de Loira, en Valdoviño, declaró que intervino cuando alertaron de que una persona intentaba forzar la ventana de una vivienda.
Así, relató que, al intentar detenerlo, Sánchez Chacón trató de golpearle con un bastón, lo que obligó al guardia a realizar dos disparos al aire y a usar su porra extensible para reducirle, logrando su objetivo y luego siendo detenido hasta la llegada de agentes de la Guardia Civil de la localidad de San Sadurniño.
El acusado, que se mostró en desacuerdo con la petición de pena de la Fiscalía, hizo referencia durante su turno de última palabra a los más de 25 años que lleva en prisión y criticó la dureza de la petición condenatoria por delitos que, a su juicio, fueron cometidos por pura subsistencia.
«Está Ferrol llena de traficantes y a esos nada», ha señalado en alusión a penas de cárcel. «La gente con 5 kilos de cocaína, o que te piden atracando por ahí y hacer mal, y nada», pero «yo no hago mal», afirmó.
Sánchez Chacón insistió en que no es una «mala persona» y argumentó que su huida al monte fue una forma de curarse tras una vida entre rejas. «Los 11 meses que estuve en la calle me curaron. Empezaron a quitarme el rostro de la cabeza», en alusión a su permanencia en las Fragas do Eume, aseguró.

