La sección segunda de la Audiencia Provincial de Ourense ha condenado a cuatro años y seis meses de cárcel y al pago de una multa de 12.000 euros a una acusada de traficar con droga que fue interceptada transportándola en su vehículo para venderla en Ourense.
Tal y como se expone en la sentencia, contra la que todavía cabe recurso ante el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG), la Sala ha considerado probado que las sustancias que le decomisaron estaban destinadas «a la venta al por menor».
Además, los magistrados han destacado que la ahora condenada «también tenía en su poder la báscula y la saca de envoltorios para preparar las dosis de cocaína» y que el dinero incautado en su domicilio «procedía de las ventas de drogas al por menor realizadas por la acusada».
Los hechos se remontan al 11 de julio de 2023, cuando los agentes de la Guardia Civil «recibieron información alertándolos» de que la mujer –condenada previamente por un delito de tráfico de drogas– iba a desplazarse a la provincia de Pontevedra «para comprar cocaína y que pernoctaría en un hotel cercano a la localidad de Sanxenxo».
En este contexto, los agentes comprobaron que estaba alojada en un hotel de ese lugar y montaron el correspondiente dispositivo, interceptándola sobre las 9.00 horas del día siguiente.
Tras darle el alto y registrar su vehículo, «hallaron escondido en la parte trasera del asiento delantero derecho, un envoltorio con cocaína, con un peso de 43,481 gramos, que la acusada tenía en su poder para destinarla a la venta».
Por ello, la han considerado autora de un delito de tráfico de drogas que «causan grave daño a la salud», concurriendo la circunstancia agravante de reincidencia, ya que había sido condenada previamente.
ABSUELTO UN ACUSADO DE TRAFICO DE DROGAS
Por otra parte, la sección segunda de la Audiencia Provincial de Ourense ha absuelto a un acusado de un delito contra la salud pública porque considera que «no ha resultado debidamente acreditado que la intervenida estuviese destinada a su venta para terceras personas».
En la sentencia, que tampoco es firme, la Sala ha indicado que el sospecho es consumidor habitual de cocaína, una droga que llevaba en su vehículo. En concreto, 5,029 gramos.
Según el relato de hechos probados, el acusado «se encontraba circulando en su vehículo» el 26 de junio de 2022, cuando los agentes de la Guardia Civil –que se encontraban en un dispositivo de control– dieron el alto.
Al mostrar el conductor un «comportamiento nervioso» procedieron a efectuar un registro del vehículo, «hallando en una bandolera 3.030 euros fraccionados en varios billetes», así como «nueve envoltorios termosellados de una sustancia que, una vez analizada, resultó ser cocaína». Sin embargo, no se pudo probar que la iba a destinar a la venta.