Sindicatos piden que la reforma de la ley gallega de salud para hacer frente a las agresiones en este ámbito incluya a todo el personal, al advertir que trabajadores de transporte, mantenimiento, limpieza y seguridad, entre otros, también son «víctimas».
En rueda de prensa este jueves, la Confederación Intersindical Galega (CIG), Comisiones Obreras (CC.OO), Unión Sindical Obrera de Santiago (USO) y la Unión General de Trabajadores (UGT) han criticado la reforma «Frankestein» por «no contemplar a todos los trabajadores del ámbito sanitario y pretender que cada colectivo vaya por su lado».
«Si en las negociaciones de la reforma no están presentes los principales actores a través de sus representaciones, no se va a llegar a ningún lado», ha denunciado el representante de la CIG, Ernesto López, quien ha reclamado a la Xunta que «incluya en ella a los empleados del servicio de la limpieza, de seguridad y a los de transporte de ambulancias».
Tal y como ha criticado en su intervención, el Partido Popular pretende «paliar el riesgo de agresiones aplicando sanciones administrativas», por lo que, ha asegurado, «no se enteran de nada, porque meter una multa implica que ya falló todo el sistema».
López ha afirmado que es necesario coordinar a todas las actividades empresariales porque «aunque el personal sanitario es el más numeroso» también hay que contemplar al de mantenimiento, limpieza y seguridad como posibles «víctimas de estas agresiones».
En esta línea, el portavoz de CC.OO., Roberto Rodríguez, ha añadido que el anteproyecto de ley deja fuera a estos colectivos de aspectos «tan básicos» como la formación, la prevención o la atención psicológica, que «solamente está contemplada para los sanitarios».
Además, la normativa identifica «únicamente la asistencia sanitaria en los centros, cuando existe también fuera de ellos, en los domicilios, en la vía pública, donde se produce un porcentaje muy alto de las agresiones, y en los medios de transporte».
Por su parte, el representante de UGT, Marcial Rodríguez, ha ampliado que el Gobierno autonómico «no tiene en cuenta los estudios ni el protocolo sobre prevención de riesgos laborales elaborados por los sindicatos en los últimos años».
AMBULANCIAS
Preguntado por la incidencia de agresiones dentro del personal de las ambulancias, Rodríguez ha apuntado que existen estudios de 2011 que apuntan a que un «70% de los trabajadores han sufrido agresiones verbales dentro del ámbito urgente extra hospitalario» y «alrededor de un 35% fueron físicas».
Con todo, los sindicatos han coincidido en la importancia de «estudiar las agresiones leves como potencialmente graves» porque todas empiezan así, y «puede quedar en una anécdota o puede acabar con una muerte».