El aeropuerto de Lavacolla en Santiago de Compostela opera con normalidad, gracias a generadores propios de energía, y la situación es de calma contenida entre viajeros y trabajadores; una situación similar a la que registran las terminales gallegas de A Coruña y Vigo.
En general, los vuelos están aterrizando y despegando sin apenas incidencias en la capital gallega, a excepción de algún retraso que ya han comunicado a los los pasajeros, como el que parte hacia Tenerife a las 16.55 horas, de Vueling.
Los usuarios de Lavacolla esperan, en su mayoría sentados y tranquilos, noticias sobre el restablecimiento del servicio eléctrico y si podría afectar a sus planes de viaje.
En algún servicio complementario como el alquiler de vehículos sí se están registrando errores, probablemente a causa de los servidores.