Un conductor de un coche chocó contra cuatro vehículos aparcados en Lugo mientras empleaba su teléfono móvil durante el manejo, hecho que la Policía Local investiga ahora como presunta causa del accidente, ocurrido el pasado fin de semana. Además, el individuo dio 0,49 y 0,47 mg/l en la prueba de alcoholemia realizada.
Según ha trasladado el cuerpo policial, el conductor del turismo, de alta gama, admitió haber perdido la atención al volante por manipular su dispositivo, lo que provocó el desplazamiento lateral de su coche que impactó contra los vehículos estacionados.
Además, los resultados de la prueba de alcoholemia a las que fue sometido posteriormente justifican la instrucción de diligencias como investigado no detenido por un presunto delito contra la seguridad vial.
Este procedimiento está justificado en casos de accidentes de tráfico con resultado de daños y una tasa de alcohol en aire expirado igual o superior a 0,40 mg/l, donde puede apreciarse que la tasa del alcohol en la conducción tiene como resultado un accidente.
Las autoridades subrayan en su comunicado que incluso con tasas de alcoholemia que no superan el umbral penitenciario de 0,60 mg/l, si se produce un accidente, los agentes pueden considerar que el alcohol influyó en la conducción, con las correspondientes consecuencias penitenciarias.
ALCOHOL
Durante el fin de semana, la Policía Local de Lugo ha tramitado un total de ocho denuncias por conducir con una tasa de alcohol entre 0,30 y 0,47 mg/l, sancionadas con 500 euros y la retirada de cuatro puntos del carné. Ademas, se ha registrado un caso con una tasa superior a 0,50 mg/l (0,57 mg/l), con una sanción de 1.000 euros y la pérdida de seis puntos.
Asimismo, se realizaron dos intervenciones por presencia de drogas en el organismo, con resultados positivos en sustancias como cocaína, metanfetamina, opiáceos y anfetaminas, con sanciones de 1.000 euros y retirada de seis puntos por cada caso.
En una de las intervenciones, el conductor implicado dio positivo simultáneamente en tres tipos de drogas diferentes: cocaína, opiáceos y anfetaminas. La Policía Local califica esta como «una combinación altamente peligrosa que compromete gravemente su capacidad de conducción».
Por otra parte, se practicó la prueba de alcoholemia a un ciclista que circulaba por la ciudad y que dio 0,47 y 0,49 mg/l de alcohol en aire expirado, lo que supone una infracción administrativa conforme a la normativa de tráfico vigente.
Tal y como ha recordado la Policía, los conductores de bicicletas y vehículos de movilidad personal (VMP), al igual que cualquier otro conductor de un vehículo, están obligados legalmente a someterse a las pruebas de alcohol y drogas cuando así lo requieran los agentes de la autoridad.
OTROS AUXILIOS
Entre otras intervenciones asistenciales realizadas por agentes locales durante este fin de semana, se atendió a una mujer con convulsiones dentro de un vehículo, que una patrulla localizó al detectar un turismo detenido con las luces de emergencia activadas y la alarma sonando de forma intermitente.
Tras comprobar que la afectada no podía abrir la puerta por sus propios medios, y ante la gravedad de la situación, los agentes rompieron el vidrio del conductor para acceder y prestarle ayuda inmediata.
En paralelo, se solicitó asistencia sanitaria urgente y la mujer fue trasladada al Hospital Universitario Lucus Augusti por una ambulancia medicalizada. Los agentes se encargaron también de asegurar el vehículo y las pertenencias personales de la afectada.
Asimismo, en otro servicio, los agentes acudieron a un domicilio donde un hombre con movilidad reducida había caído al suelo y su esposa, que se encontraba sola, no lo podía ayudar a incorporarse. Tras valorar la situación y comprobar que el hombre no presentaba lesiones, los agentes procedieron a asistirlo de forma segura y lograron sentarlo nuevamente en su silla de ruedas.