El conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, ha asegurado que la ola de gripe está actualmente en «una situación estable y de bajo riesgo», porque las urgencias llevan «varios días en descenso» y «solo el 15 por ciento» derivan en un ingreso.
Además, ha desvelado que, de las 600 camas a mayores habilitadas al amparo del plan de invierno del Servizo Galego de Saúde (Sergas), están desplegadas «poco más de la mitad».
Así lo ha explicado este miércoles el conselleiro al responder a una interpelación formulada en el pleno del Parlamento gallego por la diputada del BNG Montse Prado.
«En estos momentos, no hay saturación ni colapso ninguno», ha asegurado el conselleiro, quien no obstante ha prometido no «bajar la guardia» porque están «preparados ante un eventual incremento de la incidencia».
«La situación de normalidad solo la ven ustedes», le espetaba anteriormente la diputada nacionalista, quien ha criticado que «los problemas de la sanidad van desde A Mariña a Vigo, y desde Valdeorras a A Barbanza».
Prado ha cuestionado el plan de invierno aprobado por Sanidade, porque espera a que «esté todo colapsado para habilitar camas o contratar personal». «No hay un auténtico sistema de vigilancia», ha apostillado.
«LA PERCEPCIÓN GLOBAL» ES MENOS SATURACIÓN
El conselleiro ha comenzado por agradecer el trabajo de todo el personal del Sergas «en un contexto de déficit de profesionales» y de «incremento de la demanda». Así, Gómez Caamaño se ha referido al plan de invierno como «pionero» y ha asegurado que «la percepción global» de la población gallega es que el Sergas está menos saturado «que en años anteriores».
Este plan, que incluye medidas comunes para todas las áreas sanitarias, permite también aumentar las retribuciones de guardias y de intersustituciones realizadas por los profesionales para atender la subida de demanda.
El titular de Sanidade ha lamentado que la diputada del BNG acuda al pleno con su «argumentario de colapso y apocalipsis, en este caso microbiológico».
Posteriormente, ha defendido que el aumento de la presión asistencial que se produce durante el invierno, «no es culpa de la Xunta, ni del conselleiro de Sanidade, ni del PP», sino «del virus de la gripe».
«NO PLANIFICAR»
«Claro que no tienen culpa de que venga el virus, tienen culpa de no planificar», le respondía posteriormente Montse Prado, quien ha sacado en el pleno el caso de Lola Covelo, una exconcejala del BNG en Ponteareas (Pontevedra) que pasó «meses» hasta que fue diagnosticada de un cáncer.
En su esquela, figuraba la siguiente inscripción: «Me voy con los 57 recién estrenados (con gran ayuda de las manos ‘privadas’ que gestionan la sanidad ‘pública)».
Montse Prado ha asegurado que la familia «pidió» al partido que lo hiciese público. «Desgraciadamente, no es un caso aislado y le podría hablar de unas cuantas Lolas», ha añadido.
El conselleiro de Sanidade ha lamentado «muchísimo» este fallecimiento, no sin reprochar a la diputada nacionalista que «utilice un drama personal para hacer política». «No voy a caer en ese circo», ha añadido.
LISTAS DE ESPERA EN VIGO
Posteriormente, Gómez Caamaño ha respondido a una pregunta oral de la diputada del PSdeG Elena Espinosa, quien ha denunciado cómo las listas de espera en el área sanitaria de Vigo «empeoraron desde diciembre de 2023».
Sin embargo, el conselleiro ha señalado que las demoras en Vigo están «entre las más bajas de España» y «muy por debajo de la media» de las autonomías que gestionan los socialistas: 69 días para una cirugía –la media española está en 121– y 53,6 para la primera consulta con un especialista –40 menos que la media estatal–.
Así, Gómez Caamaño ha afirmado que el área sanitaria realizó 1.200 intervenciones más en 2024 con respecto a 2023, al tiempo que dicho que «la peor amenaza» que tienen las listas de espera es «el problema que el Gobierno de España ha montado con Muface y que no es capaz de resolver».
Finalmente, en respuesta a una pregunta oral formulada por la diputada del PP Encarna Amigo, el conselleiro de Sanidade ha reivindicado las cifras alcanzadas por el programa de cribado neonatal en Galicia: 476.000 bebés se sometieron desde el año 2000 a la ‘prueba del talón’ –el 99,9 por ciento de los nacidos– y se pudieron diagnosticar 705 patologías que, sin detección precoz, hubiesen derivado en graves consecuencias.