Miembros de la Cofradía de Pescadores de A Coruña se han movilizado de nuevo este miércoles ante la Delegación del Gobierno en Galicia para exigir al Ejecutivo central y a la Xunta que se sienten a negociar con el colectivo para «dar una solución» a las 74 familias que vivían del marisqueo en la ría de O Burgo y «están quedando en la miseria» una vez finalizadas las obras de dragado. Advierten, además, que no descartan la vía judicial.
«Si administrativamente nos ignoran y no quieren hacer caso tenemos la vía judicial abierta», ha asegurado el portavoz del colectivo, Manuel Baldomir, en declaraciones a Europa Press, para apuntar que se han puesto en contacto con «asesores».
«Nos informaron de que con la documentación que tenemos es imposible que un juez no nos dé la razón», ha destacado. No obstante, ha lamentado que este proceso «tardaría años» y «obligaría a los trabajadores a meterse en gastos jurídicos».
Con todo, ha recalcado que tienen «la esperanza de que sí haya un acuerdo» debido a que «las dos administraciones reconocen el problema y dicen que hay que dar una solución». «Queremos intentar llegar a acuerdos de manera pacífica y vía administrativa», ha apostillado.
PRÓXIMA REUNIÓN
Baldomir ha avanzado que este viernes, día 12, a las 12,00 horas está convocada una reunión con representantes del Gobierno central y autonómico.
«Por parte de las administraciones ninguna nos comunicó nada, no sabemos si están manteniendo una negociación entre ellas», ha señalado tras recordar que llevan «desde agosto del año pasado intentando negociar tanto con el Ministerio — de Transición Ecológica y Reto Demográfico — como con la Xunta». «Siempre hicieron oídos sordos», ha criticado.
«No se pueden poner de perfil y dejar todo en el aire cuando 74 familias que vivíamos del marisqueo están quedando en la miseria», ha señalado. Y es que hasta que crezca la cría, una vez finalizadas las obras de dragado y acometida la siembra y puedan faenar, deben pasar «entre 18 y 24 meses».