La vista por el asesinato del coruñés Diego Bello, abatido a tiros en enero de 2020 en la isla de Siargao, en Filipinas, prevista para este lunes, día 17, ha sido suspendida «quedando pendiente de asignación de una nueva fecha», según ha comunicado la plataforma Justicia para Diego.
En un comunicado, explica que la familia del empresario español, que se encontraba ya en Manila, ante la previsión de que el juicio siguiese este lunes, «continuará con la agenda que tenía prevista durante toda la semana» y permanecerá en el país.
La misma, según remarcan, incluye diferentes reuniones de trabajo con organismos locales, nacionales e internacionales como reuniones en la Embajada de la Unión Europea en Filipinas y entrevistas con el Defensor del Pueblo Filipino, así como con el cónsul y embajador Español.
La vista que ha sido suspendida era una nueva sesión de la causa que se sigue en Manila contra tres policías filipinos «acusados de haber asesinado al empresario coruñés y de haber falsificado pruebas para tratar de justificar su muerte», recalcan.
Los agentes argumentaron en su momento que habían disparado en defensa propia cuando iban a detenerle por supuesto tráfico de drogas, algo que la familia del joven coruñés rechazó desde un primer momento.
Posteriormente, las investigaciones realizadas por la NBI (National Boreau of Investigation), un organismo independiente del Estado filipino, concluyeron «que los policías habían asesinado a sangre fría a Diego». «Y que habían colocado en sus manos una pistola y unas dosis de cocaína, intentando así explicar su muerte como defensa propia», incide la familia.