La sección cuarta de la Audiencia Provincial de Pontevedra ha impuesto un año y medio de cárcel a un acusado de ser uno de los suministradores de estupefacientes de dos condenados el pasado mes de mayo por traficar con drogas.
El tribunal lo ha considerado autor de un delito contra la salud pública referido a sustancias que no causan grave daño a la salud y, además de la pena de prisión, le ha impuesto el pago de una multa de 300 euros. La sentencia no es firme, pues contra ella cabe presentar recurso ante el TSXG.
En el relato de hechos probados de la sentencia, los magistrados indican que, en el marco de investigaciones relativas al acopio y comercialización de sustancias estupefacientes, al menos en el periodo comprendido entre los meses de agosto de 2018 y febrero de 2019, y, en concreto, en el desarrollo de las diligencias de investigación tecnológica autorizadas judicialmente, se pudo identificar al acusado como uno de los suministradores de estupefacientes.
Además, la Sala relata que en el registro del domicilio del acusado se decomisaron efectos o instrumentos relacionados con la actividad ilícita de acopio y comercialización de drogas. El tribunal considera que el condenado no era, a la fecha de los hechos, consumidor de sustancias estupefacientes.